El secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, ha indicado que están "evaluando" la posibilidad de cerrar la Embajada estadounidense en Cuba tras los ataques acústicos de los que han sido víctimas algunos de los miembros del personal de la delegación diplomática.
"Estamos evaluándolo. Es un asunto muy grave por el daño que han sufrido ciertas personas", ha afirmado Tillerson en declaraciones a la cadena CBS.
El viernes cinco senadores republicanos pidieron al presidente Donald Trump represalias contra el Gobierno cubano, la expulsión de diplomáticos cubanos y el posible cierre de la Embajada por los ataques que comenzaron a finales de 2016.
El Departamento de Estado informó en agosto de que varios estadounidenses relacionados con la Embajada en La Habana experimentaron síntomas físicos por "incidentes" por ondas sonoras. Cinco canadienses resultaron igualmente afectados con náuseas, mareos y pérdida de audición y memoria temporal.
Cuba, Estados Unidos y Canadá han investigado estos ataques, pero por el momento no se ha esclarecido la causa ni el posible responsable. La Habana niega cualquier implicación y tampoco Washington ha señalado directamente a las autoridades cubanas, aunque en mayo pidió a dos diplomáticos cubanos abandonar Estados Unidos.
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