En 2012, con el objetivo de salvar al sector del automóvil, se inició el primer Plan PIVE. Ese año se matricularon 699.589 turismos, la peor cifra registrada en España desde 1986. Cuatro años después, al agotarse los fondos del Plan PIVE 8, los siete primeros meses del año han acabado con 730.540 unidades matriculadas.
Se estima que este año debería acabar con 1.150.000 turismos matriculados, 1.350.000 contando con los vehículos comerciales. Un panorama alentador para el sector del automóvil, pero que no evita que empiecen a entrar dudas sobre la viabilidad de estas predicciones debido a que en los próximos meses deberán enfrentarse a las dificultades sin muletas.
El Gobierno en funciones no podrá aprobar más partidas de gasto en lo que queda de año, ya que hoy ha decretado el cierre contable de la Administración -para cumplir con el objetivo del déficit fijado por Bruselas-. En resumen, sólo gastará en pensiones, prestaciones de paro, salarios, pagos de la deuda, arrendamientos, contratos de servicios ya adjudicados o políticas protegidas por la ley. Las partidas intocables.
Tampoco podrá aprobar partidas superiores a los 12 millones de euros. Por lo que, teniendo en cuenta que el último Plan PIVE necesitó 225 millones de euros, hasta que no se desbloquee la situación política el sector del automóvil no contará con más ayudas. Este mercado depende de si se logran aprobar unos nuevos Presupuestos Generales antes del 30 de septiembre o, por el contrario, se prorrogan los de 2016.
Las marcas ya intentaron presionar al Gobierno en funciones para que alargase el Plan PIVE 8 hasta el final de año. Desde el ejecutivo de Rajoy se escudaron utilizando su interinidad. Aunque estar lejos de los objetivos fijados por Bruselas a mitad de año no ayuda a iniciar otro Plan PIVE.Sin el Plan PIVE comienzan las dudas en el sector
Desde las asociaciones relacionadas con el sector muestran cierta preocupación ante la ausencia de ayudas. Jaume Roura, presidente de la patronal de los concesionarios FACONAUTO, apuntó que "Ya no tenemos PIVE y habrá que ver cómo afecta esto a las matriculaciones a partir de otoño". Porque parece obvio que sin las rebajas, los pequeños clientes verán reducidas sus ganas de renovar su vehículo.
Y es que el agotamiento de los fondos del Plan PIVE 8, que aportaba 1.500 euros a los clientes -750 euros aportados por el Ejecutivo por medio del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) y otros 750 desembolsados por los concesionarios y fabricantes de manera conjunta- amenaza al sector.
"Julio de 2016 pasará a la historia como el mes del fin del PIVE después de ocho ediciones y casi cuatro años de vigencia", alertó el presidente de GANVAM, Juan Antonio Sánchez Torres. Destaca que gracias al Plan PIVE se "han retirado de la circulación 1,1 millones de vehículos antiguos y se ha conseguido una recaudación de casi 3.400 millones de euros vía impuestos, fundamentalmente IVA".
En los próximos meses se sabrá si se cumple con los objetivos previstos, pero David Barrientos, Director de Comunicación de ANFAC, lo tenía claro al afirmar que el Plan PIVE es "un ejemplo de éxito de colaboración público privada, ha dejado en las Arcas Públicas más de 5.000 millones de euros y un efecto sobre la economía española valorado en más de 10.000 millones de euros".
Habrá que esperar para saber si el sector del automóvil lamenta la ausencia de Gobierno y acaba perdiendo la inercia positiva que había logrado gracias a la consecución de los Planes PIVE. Puede que los potenciales clientes esperen al año que viene para comprarse un coche y beneficiarse así de la siguiente tanda de ayudas.
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