Un profesor de la UR nombrado coordinador mundial del Grupo de Investigación 'Flipped Learning Global Initative'

  • Raúl Santiago Campión, profesor del Departamento de Ciencias de la Educación de la Universidad de La Rioja, ha sido nombrado coordinador a nivel mundial del Grupo de Investigación del Flipped Learning Global Initative, creado y liderado por Jon Bergmann.
Un profesor de la UR nombrado coordinador mundial del Grupo de Investigación 'Flipped Learning Global Initative'
Un profesor de la UR nombrado coordinador mundial del Grupo de Investigación 'Flipped Learning Global Initative'
EUROPA PRESS
EUROPA PRESS

El Flipped Classroom (FC) -o "aprendizaje invertido"- es un modelo pedagógico cuyo fin principal es transferir el trabajo de determinados procesos de aprendizaje fuera del aula, y utilizar el tiempo de clase, además de la experiencia del docente, para potenciar, dentro del aula, otros procesos de adquisición y práctica de conocimientos.

El Grupo de Investigación del Flipped Learning Global Initative -en el que participan investigadores de EE UU, China, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Italia, Francia, Taiwán, México, Brasil y España- pretende identificar y analizar investigaciones relevantes sobre el modelo FL; promover la publicación de artículos sobre esta materia; así como organizar, colaborar y realizar investigaciones sobre Flipped Learning.

El proyecto www.theflippedclassroom.es urgió en 2013 con la idea de recoger experiencias, recursos y herramientas que sirvan para dar a conocer y este modelo pedagógico en castellano.

Este proyecto se basa en tres pilares fundamentales: la divulgación, la formación y la investigación. El primero de ellos es el objetivo principal de la página, con casi 900 entradas en tres años y 1,2 millones de visitantes de 189 países. La formación se realiza en colaboración con entidades GrupoMT y su proyecto BIAS, que tiene firmado un convenio de investigación y asesoramiento con la Universidad de La Rioja.

¿QUÉ ES EL FLIPPED CLASSROOM?

En el Flipped Classroom, el maestro deja de ser "el sabio" del que aprenden únicamente los alumnos -con ayuda, quizá, de un libro de texto- y pasa a ser el guía de un proceso, mucho más activo por parte del alumno. Para ello, se acerca más al estudiante, mejorando la interacción con él trabajando más a demanda, resolviendo cuestiones en el momento que se plantean y que pueden ser diferentes para cada alumno. Como facilitador de aprendizajes, busca que cada alumno desarrolle su máximo potencial.

Con este modelo, los deberes se plantean como algo más cercano, adaptado, flexible a la forma de aprender de nuestros estudiantes, que encuentran ver un vídeo como algo natural para aprender. Los deberes son, pues, más sencillos y la actitud de los alumnos cambia ante ellos. Las actividades de más nivel de complejidad se realizan en clase con el profesor cerca para que les eche una mano si es necesario.

El vídeo se presenta con la parte más teórica de un tema, de manera que permite, en un breve espacio de tiempo, que el alumno aprenda los conceptos que le permitirán avanzar en dicho tema con actividades de mayor complejidad cognitiva. Los vídeos deben ser cortos y contener lo que el profesor considera básico para que los estudiantes puedan construir sus aprendizajes sobre esta información.

La principal ventaja es que alumnos que comprenden o asimilan más deprisa, pueden comenzar esta segunda fase antes, aquellos que necesitan algo más de tiempo, pueden ver el vídeo las veces que lo necesiten, ganando estos últimos en autoconfianza y evitando a los primeros una clase de repeticiones que llevan al tedio y la falta de motivación.

En cuanto a las ventajas, se potencia la interacción entre el docente y el alumno; el proceso de práctica y adquisición de conocimientos se vuelve más significativo, aumenta la motivación porque tiene en cuenta los distintos ritmos y potencias de cada estudiante*

Por otro lado, como desventajas podemos encontrar todo lo relacionado a la puesta en práctica. Hay docentes y familias, además de los propios estudiantes, resistentes al cambio de modelo. La utilización de recursos digitales porque se ve como una distracción en lugar de como una fuente de conocimiento potencial.

El Flipped Classroom es un modelo que se puede aplicar a todos los niveles educativos y materias específicas, siempre y cuando el docente realice un análisis de los contenidos y recursos más adecuados. En www.theflippedclassroom.es hay más de 1100 experiencias de docentes de todas las disciplinas y niveles.

En este portal participan unas 50 personas entre la parte editorial, los formadores y los colaboradores-editores e investigadores de la Universidad de La Rioja, la Universidad Francisco Vitoria de Madrid, Complutense, Vigo y Granada, entre otras.

Mostrar comentarios