La iniciativa, denominada Programa de Refuerzo, Orientación y Apoyo Educativo (PROA), ha comenzado el pasado mes de enero de manera experimental en 45 centros y contribuye a que mejoren la organización de su trabajo personal, desarrollen hábitos de planificación y de estudio y, en definitiva, redundará en la mejora del aprendizaje, ha informado el Ejecutivo autonómico en una nota de prensa.
El Departamento quiere ampliar este programa y, para ello, abrirá del 11 al 22 de septiembre el plazo para que los centros interesados soliciten su participación en esta iniciativa. En esta selección habrá nuevos centros y algunos que tenían el programa AUNA y ahora se transforman en PROA.
Este proyecto se sustenta en el modelo del Departamento de Educación de apostar por la equidad, la inclusión y la igualdad de oportunidades, puesto que el PROA es un compensador de desigualdades y da respuesta a la diversidad.
MODELO INCLUSIVO
El objetivo fundamental es "trabajar por un modelo inclusivo y dar respuesta a la diversidad del alumnado que hay en los centros: alumnado con necesidades educativas, alumnado de incorporación tardía al sistema, minorías étnicas. A través del PROA se quiere desarrollar la equidad y la inclusividad".
El proyecto se dirige al alumnado de entre cuarto y sexto de Primaria y a todos los cursos de Secundaria y se realizará en el propio centro fuera del horario lectivo. Los grupos estarán formados por un mínimo de 8 y un máximo de 15 alumnos.
El equipo docente propondrá al alumnado que estará en estos grupos y se informará a sus familias, que deberán dar su consentimiento. Los detalles de la iniciativa --que cuenta con un presupuesto de 440.300 euros cofinanciado al 50% por la Unión Europea-- se publicarán en el Boletín Oficial de Aragón en los próximos días.
El programa se desarrollará en cuatro horas semanales desde noviembre hasta junio. Habrá además una sesión de preparación de materiales y coordinación con la jefatura de estudios. Las actividades servirán para las estrategias de aprendizaje del alumnado por indicación directa del tutor, en la organización del tiempo de estudio, la supervisión de la agenda escolar, la realización de las tareas escolares o el desarrollo de competencias matemática y lingüística, entre otras.
De los 45 centros que participaron el pasado curso en el proyecto piloto, se prestó una especial atención al medio rural, puesto que se incluyeron 5 colegios rurales agrupados (CRA) y la mitad de los centros seleccionados estaban fuera de las tres capitales aragonesas.
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