El fundador Carlos Ramón ha vuelto a Ibiza tras haber visitado en los últimos dos meses Tanzania y Madagascar, dos países en los que la organización lleva a cabo proyectos solidarios con el fin de lograr el acceso universal a la educación.
En Tanzania, han explicado desde la ONG, Ramón entregó las 300 bicicletas usadas. Además de los niños del orfanato Kilimanjaro, los destinatarios de los vehículos han sido algunos niños que caminan hasta 20 kilómetros al día para ir a su colegio.
También se han entregado bicicletas a empresarios locales para ayudarles a emprender su negocio o trasladar mercancías. Otras bicicletas se han donado a los niños del orfanato Mabogini y*al colegio Orkeeswa school.
"Los niños de esta zona donde hemos entregado las bicicletas tienen que recorrer mucha distancia para poder acudir al colegio. Muchos de ellos recorren 10 kilómetros de ida y otros 10 de vuelta", ha explicado el cooperante.
En el caso de las personas que necesitan un vehículo de transporte para trabajar o crear su pequeño negocio, "ha sido muy emocionante porque gracias a estas bicicletas hay personas que podrán arrancar su propio negocio o mejorarlo con la bici como medio de transporte", ha dicho Ramón.
Tras el trabajo de cooperación en Tanzania, la ONG Juntos ha viajado hasta Madagascar, donde la ONG está trabajando en la ampliación de la escuela Los Zafiros con las construcción de 3 aulas de Primaria y 4 de Secundaria, un pozo de agua potable y placas solares y luz para todo el centro y también ayuda en las distribución de un mínimo de dos comidas al día para los alumnos de Los Zafiros.
El fundador de Juntos ha explicado que "prácticamente están terminadas las 3 primeras aulas que hemos construido en esta isla del Índico, en la región de Tulear, una de las más castigadas en Madagascar. Cabe recordar que Madagascar es el tercer país por la cola en cuanto a malnutrición infantil y la zona de Antsohamadiro es lamentablemente famosa por ser una de las zonas de extracción de zafiros y donde hay graves problemas de explotación laboral infantil".
Las aulas han sido bautizadas con los nombres de Pepe Reina, Aula CEIP S'Olivera y Aula Colegio Mestral, que han financiado en parte o en su totalidad la edificación de las aulas.
CONTRA LA EXPLOTACIÓN SEXUAL INFANTIL
Juntos va a emprender otros proyectos en Madagascar para luchar contra la explotación sexual infantil. "La zona donde está la escuela que construimos, Tulear, está muy castigada por la explotación sexual infantil. Hay muchos embarazos precoces, la mayoría de las niñas de las aldeas, sobre todo, una vez acabada la educación primaria se quedan embarazas, a muy temprana edad", explica Carlos Ramón.
"Nada más llegar a Tulear, a las primeras horas de llegar, conocí a una niña de 13 años con su bebé en estado crítico porque no podía amamantarlo por ser tan joven", ha concluido.
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