Ponsatí lamenta el "bullying" del Estado hacia la comunidad educativa catalana

La consellera de Enseñanza de la Generalitat, Clara Ponsatí, ha criticado que "lo que está pasando es claramente bullying del Estado" hacia los ciudadanos y la comunidad educativa, y ha defendido que los directores de centros no tendrán que hacer absolutamente nada ante el referéndum del 1-O, más allá de votar como cualquier otro ciudadano.

En declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press, Ponsatí ha afirmado que los escritos el delegado del Gobierno, Enric Millo, y la Fiscalía "están escritos en un tono que parece que efectivamente sea responsabilidad de los directores impedir el referéndum", y lo ha calificado de ultraje porque no es su responsabilidad, y ha añadido que la Generalitat tiene las llaves de los centros.

"No anticipo ningún tipo de problema para ningún empleado de la Conselleria de Enseñanza", pero ante las actuaciones de Fiscalía que considera insólitas, comprende que la gente esté preocupada, aunque ha añadido que han sido extremadamente cuidadosos desde el Govern.

La consellera ha afirmado que no sabe qué pasara el viernes cuando se acaben las clases, y ha defendido que el referéndum es legal y que Fiscalía se está "extralimitando" y no tiene fundamento legal para sus amenazas.

Ha dicho que, hasta donde sabe, los Mossos d'Esquadra han ido a investigar si se han hecho órdenes a centros educativos o directores: "Ya pueden ir investigando, porque no se ha dado ninguna instrucción sobre el referéndum a ningún profesor ni instituto", aunque ha admitido que la orden generará problemas.

Ante la situación compleja, ha pedido el "máximo civismo" el domingo dentro de los centros educativos, y ha pedido a los ciudadanos que cuiden el mobiliario, el material y las instalaciones.

Ha dicho que en las escuelas preocupa mucho el tema del acoso, un comportamiento que abordan con un programa específico, 'Aquí prou bullying', y ha añadido que ante los sucesos "es extraordinariamente adecuado revisar los protocolos de este programa".

Ponsatí ha acusado al Estado de perder los referentes democráticos, y cree que "la justicia española ha perdido totalmente los referentes de la división de poderes".

Ha considerado como "un ejemplo" democrático la forma en la que el Reino Unido trató la reivindicación independentista en Escocia, donde ha dicho que se pudo abordar la discusión sin enfrentamientos.