¿Cuáles son las consecuencias de copiar en un examen?

En España no hay una normativa general para sancionar a los 'copiones'. El único reglamento que se podría aplicar en estos casos es el Decreto del 8 de septiembre de 1954, por el que se aprueba el reglamento de disciplina académica, nada menos que de hace 60 años.

Esta práctica se da sobre todo en estudiantes de Secundaria y en la Universidad. Desde las típicas chuletas a boli en brazos y piernas hasta los más sofisticados sistemas de radios que comunican con el exterior.

Pero la normativa podría cambiar después de la denuncia de la Universidad de Almería que ha pedido el uso de inhibidores de frecuencia, de uso restringido a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a Defensa.Esta nueva temporada de caza de chuletas llega tras la adaptación de su normativa que contempla que cualquier alumno que tenga su teléfono móvil encendido durante la realización de la prueba será suspendido automáticamente.

Muy diferente que en el caso de los estudiantes chinos que en el caso de que copien en exámenes les quedará como "antecedentes" de por vida en su expediente académico.Algunos contemplan la expulsión temporal

En el caso de la Universidad Complutense de Madrid la sanción depende del docente, en la mayor parte de las ocasiones copiar en los exámenes acaba en un suspenso.

La misma estrategia se aplica en la Universidad de Sevilla, que hace unos años intentó aprobar una normativa que permitía a los alumnos seguir realizando su prueba aunque fuese 'pillado' copiando. Finalmente tuvo que desecharla y normalmente acaba con la pérdida del derecho de los exámenes de la asignatura quedando pendiente para el año siguiente.

En la Universidad Pública de Navarra, cuyo organismo de Educación creó su propio reglamento, castiga a los jóvenes que copien suspendiendo directamente el examen. Además, todos los estudiantes de esa universidad están obligados a firmar una declaración de honestidad académica con la que se comprometen a no copiar. Lo hacen junto a su matrícula.

En la UNAV la suplantación de personalidad en exámenes, tanto quien suplanta como quien se

presta a ser suplantado está considerado como una infracción grave y acarrea una suspensión de una semana a tres meses (expulsión temporal de los edificios de la Universidad de Navarra). Además, conlleva la pérdida de las convocatorias ordinaria y/o extraordinaria en el correspondiente curso académico de una o varias asignaturas.

"Por la presente, me comprometo a no hacer uso de medios fraudulentos para la superación de mis estudios en la Universidad Pública de Navarra", es lo que tienen que firmar. Esta medida también la contempla la Universidad de Cantabria.

La Universidad Pompeu Fabra, en cambio, es una de las más duras en cuanto a la penalización por echar un ojo a los apuntes o copiar del de al lado. La normativa dice que los alumnos deberán depositar los móviles antes del examen y además copiar en un examen es una falta grave que puede suponer una expulsión temporal.A la cárcel por copiar

En 1992, el Gobierno de Bangladesh aprobó una ley que permite encarcelar a los niños mayores de 15 que hagan trampa en sus exámenes finales. La norma incluye una campaña anual en los medios de comunicación para advertir a los estudiantes de la existencia de este tipo de sanción.En Hong Kong ya es delito

18.000 estudiantes se quejaron públicamente de que un buen número de candidatos habían copiado todo su examen de la web a través de sus teléfonos móviles. Como ejemplo, el subsecretario general de esta Autoridad, Francis Cheung Wing-ming, declaró que Hong Kong debe seguir el modelo de China y Taiwán, donde copiar en un examen es un delito penado por la ley.En La India los padres ayudan a sus hijos a copiar La imagen parece una fuga masiva de presos de una prisión. Sin embargo, el edificio ni siquiera es una cárcel, sino un colegio, y los que cuelgan de los barrotes jugándose la vida, no son presos, sino padres ayudando a copiar a sus hijos en el equivalente indio a nuestra selectividad. Fraudes masivos con el beneplácito de examinadores y policías que las autoridades se empeñan en negar.Las últimas técnicas 3.0 para copiarLos bolis ya no sólo son azules, negros, rojos o incluso verdes. Actualmente hay en el mercado de bolígrafos de tinta invisible que incorporan una luz ultravioleta que ayudan a desvelar el mensaje camuflado, en este caso los apuntes o esquemas del temario a examinarse. Una herramienta discreta en el mensaje, pero que puede jugar una mala pasada ante una luz demasiado llamativa.Hay quienes se arman de paciencia y recurren al recurso tradicional, pero con una precisión cuya dedicación podrían dedicarla posiblemente al estudio: hay quienes han logrado transcribir fórmulas en lugares tan recónditos como una uña.Otro clásico consiste en camuflar una chuleta en la etiqueta de una botella de agua, ya sea fuera o en el interior de la etiqueta para poder leerla desde fuera, a través del plástico (con cierta dificultad), y no sólo eso: los más sofisticados han llegado incluso a maquetar la etiqueta de una botella en el ordenador e incluir los datos del temario en las partes del diseño donde se incluye las anotacionespropias del producto, conservando una falsificación de la etiqueta de la botella con una cantidad de datos inapreciables a simple vista.La electrónica llega a ser un elemento importante en el uso de las chuletas: los ‘ smartphones’ y sus pantallas permiten aglomerar una gran cantidad de información y desplazarla sin necesidad de acumular varios papeles.Los auriculares también pueden ser una herramienta para obtener los datos necesarios del examen. Los más rudimentarios graban el temario, y otros están dispuestos a que alguien les recite los apuntes a distancia a través de una llamada por manos libres, incluso hay quienes están dispuestos a pagar altas cantidades de dinero por un dispositivo inalámbrico e invisible.Con la actual llegada de los ‘ wearables’, los ‘ smartwatch’ no han pasado desapercibidos para los más hábiles. Un reloj de apariencia inofensiva puede ser un coladero de información al alcance de la muñeca, sin crear los recovecos necesarios con los que camuflar un ‘smartphone’.Copiar hasta por whatsapp

La Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) denunciaba el pasado 2013 ante la Fiscalía de Barcelona a la Academia Sol por filtrar supuestamente a través de la aplicación de mensajería instantánea Whatsapp las respuestas de un examen de la asignatura Electromagnetismo de segundo curso de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de Barcelona.

Según la investigación interna de la universidad, dos estudiantes desconocidos -no matriculados- entraron en el aula donde se realizaba el examen el 30 de enero, recogieron la prueba y abandonaron la clase minutos después para poder chivar las respuestas a alumnos de la Academia que estaban conectados por este chat.

Una veintena de los estudiantes presuntamente implicados fueron suspendidos, si bien la UPC optó por no abrir un expediente a ningún alumno porque no querían "cargar tintas" contra ellos, puesto que colaboraron en la investigación interna.