En España hay 3.547.508 conductores con más de 65 años, ¿son un peligro?

Manuel. A. lleva toda la vida conduciendo y hace apenas un mes había renovado su carnet de conducir. Tiene 86 años y el pasado sábado arrolló a un pelotón de ciclistas en la localidad de A Guarda (Pontevedra) causando la muerte de uno de ellos y dejando siete heridos, cuatro de ellos muy graves que permanecen en cuidados intensivos. Manuel conducía su todoterreno y embistió a una decena de un grupo de casi 20 ciclistas que circulaban en fila de a dos por la calzada pegados al arcén. Ahora, este pequeño empresario de Nigrán, se enfrenta a un delito de homicidio imprudente y otro de omisión del deber de socorro.

El trágico accidente de Pontevedra reabre el debate respecto a qué edad hay que dejar a qué edad hay que dejar de conducir o si hay que limitar los permisos a partir de unos determinados años. Hace un año, en febrero de 2015, se produjo un suceso similar en la localidad abulense de El Tiemblo, cuando un conductor de 89 años se estrelló frontalmente contra otro vehículo. Fallecieron cinco personas y sólo una mujer de 40 años, esposa del conductor, sobrevivió.

En España no existe un límite de edad para renovar el carnet de conducir. La norma europea establece que los mayores de 65 tienen que renovar el carnet cada cinco años y no hay límite de edad siempre que se mantengan las condiciones psicofísicas para poder conducir. Sólo se puede denegar el carnet de conducir en caso de determinadas enfermedades.  De momento, la DGT no se ha planteado limitar los permisos aunque si reconoce que a partir de los 55 años comienzan a emperorar la capacidad visual, la capacidad auditiva, de reacción y se va acelerando el deterioro cognitivo.

Según el último censo de la Dirección General de Tráfico correspondiente a 2014, en España hay 3.547.508 conductores con más de 65 años, de los cuales 1.206.810 tienen más de 74 años y 961.521 entre 70 y 74.Las previsiones que manejan en tráfico debido al aumento de la esperanza de vida y el envejecimiento de la población es que en una década se alcancen los 10 millones de conductores con más de 65 años. El 13,6% de los conductores en España tienen más de 65 años y además, según el Observatorio de Seguridad Vial que elabora Tráfico, solo el 8,6% de las personas mayores de 60 años con permiso no conduce.

Las estadísticas de víctimas de la DGT indican que en 2014 los mayores de 65 se vieron implicados en 10.344 accidentes en los que fallecieron 477 de ellos, 1.571 resultaron heridos hospitalizados y 9.770 heridos no hospitalizados. Como usuarios, el 45% de los mayores de 64 años fallecidos eran conductores, el 37% eran peatones y el 18% eran pasajeros.

La cuestión que se abre es si existe una edad a la que hay que dejar de conducir. Algunos geriatras fueron rotundos después del citado accidente en El Tiemblo del pasado año. Esteban Pérez Almeida (Geriatra) aseguraba a la cadena Cope que “no se está capacitado para conducir con 89 años. Cuando pasan los años nos deterioramos. A la hora de conducir falta de agudeza visual y de la audición, pero los fundamental es que dismunuyen los reflejos. Con esa edad muchísimo más. También disminuye la sensibilidad.  A los 80 años puedes estar muy bien, pero a los 85 cambia mucho. Se puede estar activo, pero se merma sí o sí”.

La estrategia de la DGT es fomentar “la educación continuada a lo largo de la vida” y aboga por que las personas mayores de 65 años se conciencien de “los riesgos adicionales” que implican conducir un vehículo o ser peatones, debido a la merma de las condiciones psicofísicas asociadas a la edad. En este sentido, desde la DGT están “cada vez más interesados en reactivar y poner en funcionamiento los permisos modulados, con restricciones parciales, que no sólo sirven para eliminar que haya conductores no suficientemente aptos circulando, sino también para formarlos y educar a esas personas que estaban sin reconocer que pueden tener una limitación de visión, de cansancio o de otros factores”.

Con la edad, los reflejos y las capacidades físicas para conducir van a menos. Sin embargo en nuestro país si se pasan las pruebas no existe un límite de edad para dejar de estar al volante. "Desde que uno obtiene el permiso de conducción está sujeto a una vigencia y van a ser vigencias de diez años hasta que cumplimos los 65 años. Desde que tenemos 65 en adelante serían cada cinco años" cuenta Felipe Cogolludo, experto en seguridad vial.

Los expertos indican que la conducción ya no es segura si concurren varias de estas situaciones:

Dificultad para aparcar. Sufrir frecuentes accidentes leves o de ‘chapa’. Invadir con frecuencia el carril del sentido contrario. Peatones y vehículos aparecen de pronto. Tardar mucho en recorrer trayectos cortos y conocidos. Se empieza a pensar que ya no se conduce bien. No se recuerda cual es el trayecto realizado.

De hecho, 7 de cada 10 conductores mayores de 65 años aseguran sentirse más lentos e inseguros al volante. A pesar de esto, reconocen que cogen el coche casi a diario. Y aunque se haya renovado el carnet lo recomendable para este tipo de conductores es evitar los viajes largos, la conducción nocturna y también en condiciones climatológicas adversas.

Algunas compañías en Reino Unido o Irlanda no alquilan los coches a mayores de 70 años y en Dinamarca se les prohibe conducir por encima de los 70. Italia se plantea retirar el carné a los mayores de 80 años y, en Japón, se dan premios y promociones comerciales a los mayores que entregan las llaves del coche de forma voluntaria. En algunos Estados de EE UU también se han aplicado limitaciones por edad, aunque no se han demostrado eficaces.