Joan Miralles: "Se deberían regular los alquileres vacacionales, no prohibirlos"

Homeaway Airbnb, Idealista, Vibbo... Estos son los nombres de algunas de las páginas que se dedican a alquilar pisos por internet. Lo que diferencia a unas de otras es la cantidad de días por las que alquilan sus vividas. Esto es lo que quiere regular el Ayuntamiento de Palma para detectar los alquileres vacacionales.

Este Consistorio mallorquín quiere luchar contra el creciente fenómeno de las plataformas de vivienda vacacional en las que muchos propietarios comercializan y promocionan inmuebles plurifamiliares con finalidades lucrativas, un extremo que ya está prohibido por la Ley de Arrendamientos Urbanos.

“Hasta que entre en vigor la nueva Ley nos tenemos que regir por la que tenemos ahora que es la de 2012. Esta Ley prohíbe que los alojamientos no inscritos en los registros de empresas, actividades y establecimientos turísticos utilicen las denominaciones “vacacional”, “turística” o similares. El problema está en que no hay un listado de páginas webs concretas en las que se prohíba su publicación. Esto quiere decir que a día de hoy hay un vacío legal”, explica Joan Miralles Presidente de la la Asociación de Apartamentos y Viviendas de Alquiler de Temporada de Baleares (Aptur).

Miralles señala que hasta la fecha se han multado a algunos propietarios de estos pisos por incumplir la Ley. “Las multas hasta ahora iban entre 4.000 hasta los 20.000 y es verdad que casi todas han sido de 4.000. Con la nueva Ley pretenden alcanzar los 40.000 euros. Esta no es la solución al problema, no se puede prohibir a familias, cuyo único ingreso es este, que no puedan alquilar sus casas” apunta Miralles.

El Presidente de Aptur señala que “lo único que se está planteando el ayuntamiento es multar a personas que lo único que han hecho es poner su casa en un anuncio en Internet. Lo que están intentado hacer es poner puertas al campo y eso no se puede hacer. Prohibirán unas páginas y luego saldrán otras como pasó con las páginas de descargas... Lo que estamos haciendo es perder una gran oportunidad para regular esta situación”.

Joan Miralles considera que lo que se debería hacer es fiscalizar mejor estas viviendas no prohibir el alquiler vacacional. “Por ejemplo, en páginas como Airbnb se deja un rastro por lo que se puede controlar perfectamente los pagos a través de las tarjetas de crédito. Los dueños podrían pagar unos impuestos como las Ecotasas que si pagan otros alquileres vacacionales”, apunta.

Si entre en vigor la nueva Ley que se espera que sea antes de verano, todos las personas que quieran alquilar algunas de sus viviendas menos de 60 días deberán demostrarlo al consistorio. “Nos van a considerar a todos culpables hasta que demostremos lo contrario”, concluye Joan.