Donaciones y créditos a partidos políticos ya no serán 'top-secret': se colgarán en Internet

Los políticos son la tercera preocupación de los españoles, según el CIS. Y en aras de recuperar el crédito y la confianza perdida, todas las fuerzas políticas se han puesto de acuerdo en elaborar una reforma de la Ley de Financiación de Partidos Políticos, que recoge una serie de cambios importantes que les obligarán a ser más austeros y, sobre todo, más transparentes.

Una de las novedades más importantes de esta reforma, que este martes la Comisión Constitucional del Congreso remitió al Pleno para que sea aprobada a finales de mes, consiste en que una vez que el Tribunal Constitucional fiscalice las cuentas anuales de un partido político, éstas deberán ser públicas.

Para ello, los partidos políticos deberán colgar en sus páginas web su balance y cuenta de resultados, los créditos que tienen concedidos por entidades financieras y, en caso de existir, las condonaciones de deuda que consigan.

Además, se les obliga a informar al Tribunal de Cuentas de cualquier donación o renegociación de deuda con las entidades financieras. Es decir que, una vez que el Tribunal de Cuentas elabore su informe sobre la situación económica de un partido, las donaciones y deudas del mismo deberán ser públicas en Internet.

Estas obligaciones se extienden a las fundaciones de los partidos políticos, de forma que el Tribunal de Cuentas también podrá someterle a auditorías y no sólo fiscalizar las donanciones recibidas, como ocurría hasta ahora.

Límite a las donaciones y deudas

Otra de las novedades de la nueva Ley de Financiación de Partidos Políticos consiste en poner coto a las donanciones a las formaciones políticas. Ahora se les obliga a comunicar al Tribunal de Cuentas cualquier donación de más de 50.000 euros o cualquier bien inmueble que reciban de empresas jurídicas. Tienen tres meses para comunicarlo.

Además, los bancos no podrán condonar una deuda de más de 100.000 euros a un partido político y se prohíbe que puedan realizar donaciones aquellas empresas que presten servicios o tengan cualquier contrato con la Administración.

Y si una fundación recibe subvenciones públicas no podrá hacer donaciones a un partido. Lo que sí podrán hacer son actividades conjuntas, como por ejemplo la esponsorización de un curso, según explicaron fuentes parlamentarias.

Habrá sanciones a quien incumpla

Otro de los pilares de la nueva ley consiste en dar más poder al Tribunal de Cuentas, a quien se le dota de capacidad sancionadora. Si por ejemplo un partido se salta el límite de donaciones privadas -establecido en 100.000 euros anuales-, recibirá un multa por el doble de la cantidad excedida. O si no presenta sus cuentas a esta institución, podrían paralizarse las subvenciones públicas a las que tenga derecho.

Éste es un paso importante, ya que hasta ahora el Tribunal de Cuentas se limitaba a sacar los colores a los partidos y poco más.

El único escollo, las subvenciones a partidos

La nueva Ley de Financiación de Partidos Políticos también recoge una reducción del 20% en las subvenciones a los partidos y sindicatos y elimina la cláusula según la cual estas ayudas públicas se revalorizaban según el IPC. Ahora, se fijará en cada Presupuesto anual cuál es el importe de esta subvención.

Este cambio ha levantado ampollas en buena parte de la oposición porque consideran que esto condena a los partidos políticos a una gran incertidumbre a la horade hacer sus previsiones económicas. Y que su salud financiera va a depender del partido político que esté en el Gobierno.

PSOE, CiU, PNV y todas las formaciones minoritarias critican este punto y piden que se busque una fórmula que dé "certeza" a los partidos. Pero el PP, junto con UPyD, se oponen a cambiar este punto y lo justifican en la situación económica. "Los españoles y las empresas tampoco tienen certeza sobre su futuro. No podemos ser nosotros más" dicen en el PP.