Los vecinos de Beade, en Pontevedra, se llevaron un tremendo susto este jueves al escuchar una fuerte explosión que incluso derribó dos paredes de la vivienda. Todo comenzó cuando, por causas que se desconocen, comenzaron a arder unos cargadores que estaban enchufados en la corriente.
Las llamas se extendieron por la habitación, alcanzando la cama y una mesilla, en cuyo interior se encontraban dos desodorantes, que explotaron al entrar en contacto con las llamas. La deflagración fue tan grande que derribó dos de las paredes de la estancia. Además provocó un boquete en el techo.
Fue un particular el que dio la voz de alarma a los servicios de emergencias del 112 de Galicia explicando lo ocurrido. Los bomberos de Vigo, protección civil y policía local se movilizaron inmediatamente y acudieron a la casa situada en la parroquia de Beade, en Pontevedra.
Afortunadamente, no hubo ningún herido, a pesar de que en el momento de los hechos había varias personas en el interior de la vivienda. Ni las llamas ni la explosión afectaron a una caldera de gasóleo que estaba situada a escasos metros de la vivienda y que podría haber provocado una desgracia de mayores dimensiones.
La explosión ha provocado cuantiosos daños en la vivienda que ha quedado inhabitable. Por eso los habitantes han tenido que buscar una alternativa para establecerse mientras se reparan los daños.
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