La esposa de López Aguilar compara a su marido con un neumólogo que fuma

Natalia de la Nuez, todavía esposa del exministro de Justicia Juan Fernando López Aguilar, define a su esposo como "un pobre atormentado". El político canario, uno de los principales impulsores de la actual Ley de Violencia de Género, está siendo investigado por presuntos malos tratos a su esposa.

En una entrevista publicada en la revista Vanity Fair horas después de estallar el escándalo en la opinión pública, De la Nuez asegura que no alberga ningún rencor a su marido, del que se está divorciando. Ha querido aclarar que no ha presentado ninguna denuncia, y que el proceso legal se inició a raíz de las pesquisas policiales iniciadas tras un conato de incendio producido en su casa.

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El 28 de marzo los vecinos alertaron a los servicios de emergencia porque estaba saliendo humo bajo la puerta del domicilio de Natalia de la Nuez. Por aquel entonces López Aguilar ya había dejado de vivir allí, pero el vecindario no lo sabía. La policía sospechó que podía tratarse de un intento de suicidio de la mujer a raíz, e interrrogó a los vecinos sobre la relación entre López Aguilar y De la Nuez. Ellos declararon que oían con frecuencia gritos y discusiones de la pareja. Incluso les habían visto forcejeando en el rellano de la casa."Hablan de lo que han visto", explica Natalia. "Entonces la policía está obligada a ponerlo en conocimiento de el juzgado de violencia de género. Pero no hay ninguna demanda por mi parte, ni por parte de mi familia. Eso tiene que quedar claro. Y no la va a haber".Un pobre atormentado

Califica a Juan Fernando como "un pobre atormentado". Y añade: "Me causa mucha compasión. Me pongo en su lugar y sé que lo debe estar pasando muy mal, pero yo ya no le puedo ayudar a gestionar todo eso". Aunque la hermanas de Natalia declararon ante la policía que López Aguilar la insultaba, vejaba e incluso golpeaba a ella y los niños, la presunta maltratada insiste en que nadie va a presentar ninguna denuncia.

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De la Nuez ha confesado que su relación con López Aguilar se había deteriorado cuando descubrió que su marido había iniciado una relación con otra persona. Pero le parece irrelevante informar de cuándo comenzaron los supuestos malos tratos. Tampoco otorga importancia a que López Aguilar fuera ministro de Justicia cuando se aprobó la Ley Integral contra la violencia de género. "Eso es como el neumólogo que sabe que no hay que fumar y fuma. Son situaciones humanas complicadas en las que cada uno canaliza su rabia y su frustración como puede", apunta.

"Tengo que tener una buena relación porque tenemos dos hijos pequeños y los tenemos que educar. Él tiene que aguantar mucha presión, en el partido, en el trabajo, las listas electorales. Tiene que dar la cara en el ámbito laboral, que es donde él es perfecto", añadió. Asegura que no es vengativa, y que quiere centrarse de nuevo en su familia y amigos.La denuncia del 10 de enero

Los problemas conyugales de López Aguilar saltarona la esfera pública cuando el actor Gorka de la Nuez, hijo de una primera relación de Natalia, denunció al eurodiputado a principios de enero. Lo hizo porque llegó a su casa y se encontró a su madre con el ojo morado. Informado por una amiga de la madre, se convenció de que aquel golpe se debía a una agresión de López Aguilar, y se fue inmediatamente a la policía a interponer una denuncia. Al día siguiente retiró la denuncia cuando la madre le consiguió convencer que aquella vez había sido un error de interpretación. "Tengo dos hijos de cinco años y, tras una persecución, me di un golpe y se me puso el ojo negro", comenta. "Como todos los procesos de divorcio, tienen su parte complicada, violenta y agresiva. El contenido de la denuncia tiene verdades, pero en ese momento no era justo interponer esa denuncia", reitera.

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