La venta de armas a Israel aumenta un 50% pese al cese de permisos del Gobierno

  • Ninguna de las operaciones autorizadas en el segundo semestre de 2008 tenía por destino Tel Aviv. Las exportaciones se hicieron “con cargo a licencias de 2007”, según el informe de Industria.
Manuel Valiño
Manuel Valiño

- Gráfico: A quién exportó armas España en 2008

Los principales clientes de las empresas armamentísticas españolas siguen siendo, en su mayoría, miembros de la OTAN. Países pertenecientes a esta organización “absorbieron un 70,5% de las exportaciones” del año 2008, según el informe de exportaciones de material de defensa publicado recientemente por la Secretaría de Estado de Comercio. Las ventas a Estados no pertenecientes ni a ese grupo ni a la UE siguen reduciéndose cada año: su valor representó un 28,3% del total, por el 31% de 2007 y el 37% de 2006.

Destaca, sin embargo, el caso de Israel, destino que el documento califica como “de especial sensibilidad”. Varias organizaciones no gubernamentales denunciaron hace algunos meses, tras conocerse el contenido del informe del primer semestre de 2008, la venta de armamento a países donde “se cometen violaciones de los derechos humanos, algunos “sumidos desde hace décadas en conflictos armados”. Entre ellos, Israel.

Aunque ninguna de las licencias concedidas por el Gobierno entre julio y enero correspondió a ese país, las exportaciones alcanzaron los 2,3 millones de euros, aumentando un 53,3% con respecto a 2007 y multiplican casi por nueve lo exportado en 2005 al mismo destino. El Gobierno explica que se realizaron “envíos materializados en 2008 con cargo a licencias autorizadas en el año 2007 todavía vigentes”.

Noruega, Alemania y Reino Unido se mantienen entre los principales destinos de las armas o componentes fabricados en España. El país escandinavo gastó más de 250 millones en la compra de una tercera fragata, mientras que los otros dos adquirieron partes y piezas para el Eurofighter 2000 y para el avión de transporte militar A400M.

El doble de permisos

Pero entre esa lista de principales inversores se cuela Marruecos, el tercero atendiendo al gasto total con el 12,2%, que desembolsó 113,9 millones en la adquisición de más de un millar de vehículos no blindado, ambulancias y camiones cisterna. Colombia, otro destino al que las ONG pidieron que no se transfiriesen armas por falta de garantías, duplicó su gasto en defensa con la compra de un avión de transporte de tropas.

El Gobierno concedió en 2008 el doble de autorizaciones para vender armas a otros países que hace dos años. El valor de las licencias emitidas ascendió en 2008 a más de 2.500 millones, por los 1.295 millones de 2006. Las ventas efectuadas supusieron, sin embargo, el 37% de las operaciones autorizadas, por el 47% de 2007 o el 65% de 2006. La razón es que varias de las licencias concedidas no fueron usadas en su totalidad.

Las exportaciones de material de defensa aumentaron el pasado ejercicio sólo un 0,2% con respecto al año anterior, por un valor de 934,4 millones de euros. En 2007 la subida había sido del 10% (845 millones en 2006; 932,94 millones en 2007). Destaca la venta de aeronaves (231,9 millones, el 34,4% del total) y buques de guerra (el 27,7%).

El Ministerio de Industria tramitó en 2008 más de 717 solicitudes de permisos para vender material de defensa. Cinco fueron denegadas por la Junta Interministerial que se encarga de evaluar las peticiones. El Gobierno destaca en el informe tanto su “respeto escrupuloso y absoluto” de los embargos “vigentes de las Naciones Unidas, la Unión Europea y la OSCE”, como el cumplimiento de los compromisos internacionales.

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