Los barones podrían retirar el apoyo a Rajoy como candidato si no hace cambios profundos

    • Algunos barones populares aseguran que como no vean "cambios profundos" en el PP de cara a las elecciones de mayo podrían no respaldar a Rajoy y exigir otro candidato a la presidencia.
    • Rajoy dejó claro en boca de Floriano que no cambiará ni sus políticas, ni la estrategia del PP ante los nuevos partidos.
El PSOE pide por tercera vez en quince días la comparecencia de Rajoy en el Congreso
El PSOE pide por tercera vez en quince días la comparecencia de Rajoy en el Congreso

Algunos reconocen que suena exagerado, otros lo ven factible. Lo cierto es que ya hay barones angustiados y enfadados que como no vean "cambios profundos" en el PP de cara a las próximas elecciones (24 de mayo) podrían no respaldar a Rajoy y exigir otro candidato a la presidencia para las elecciones generales de noviembre.

La resaca de los comicios andaluces, su gestión y 'las formas' del partido, a la hora de salir a dar la cara tras perder 17 diputados, ha colmado el vaso de 12 barones territoriales que este lunes mismo daban plantón a Rajoy y no se presentaron en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional para analizar el 'batacazo'. Para el vicesecretario de Organización, Carlos Floriano este gesto "no tiene la menor importancia. Empieza la campaña en mayo y están en eso".

Floriano salió solo ante los medios tras la reunión para informar lo allí analizado. Algunos presidentes autónomicos esperaban que el director de campaña estuviera acompañado por María Dolores de Cospedal, la misma que se opuso a la designación de Juan Manuel Moreno como candidato a la Junta.

Grupos de militantes en las redes ya anunciaban que tenía que ser el propio Rajoy quién diera la cara en estos momentos difíciles, tras dejar a Casado con la peor papeleta en la noche electoral. (Fuentes críticas aseguraron a este medio que no era responsabilidad de Pablo Casado dar las pertinentes declaraciones, ya que es portavoz de campaña para las elecciones de mayo y no de las andaluzas).Rajoy no cambiará sus políticas

Rajoy dejó claro en boca de Floriano que no cambiará ni sus políticas, ni la estrategia del PP ante los nuevos partidos, 'Podemos' y 'Ciudadanos'. Casi en la línea de 'lo que pasa en Andalucía se queda en Andalucía'. Cero autocrítica.

Según fuentes populares, Rajoy en la reunión dijo a los que estaban que "había que ponerse las pilas" y sin más autocrítica señaló que "hay que seguir trabajando, como hemos hecho hasta ahora con el mayor empeño posible". Aseguran que no pronunció 'Ciudadanos' en todo lo que duró la reunión y se refugió en datos para justificar que esta derrota no es extrapolable al resto del territorio.

Mensaje que terminó con el enfado monumental por parte de algunos barones que apuntan que su partido no se va a salvar solo con las mejoras económicas y que "si nada cambia en clave nacional, esto va a ser un gran fracaso". Parece que la estrategia de los populares de vender a 'Ciudadanos' como la 'marca blanca' de su partido no funciona. A ello se suman los problemas de corrupción que afectan al partido.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, dijo que el resultado en Andalucía es "infinitamente peor del esperado"; la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, pidió "autocrítica" a los suyos y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, señaló que "hay que explicar bien" las decisiones que se toman.

La candidata a la alcaldía de Madrid, Esperanza Aguirre, fue la única que se atrevió a comentar en público lo que muchos barones susurran en privado y desveló que ella con unos resultados como los obtenidos en Andalucía, "habría convocado un Congreso Extraordinario".8 años arrastrando problemas

Este 'ruido de sables' no es nuevo para Rajoy, ya que en el XVI Congreso Nacional que le dio la presidencia en 2008, también hubo descontento entre las filas más críticas que aseguraban que el partido no iba hacia buen puerto.

El 21 de junio de 2008 en el XVI Congreso Nacional del partido y por primera vez desde hace más de 20 años, el PP se vio envuelto en una aguda crisis interna derivada de la derrota electoral del 9-M.

Dirigentes como la propia Aguirre intentaron articular una candidatura paralela a la de Rajoy, tras considerar que no tenía el 'temple suficiente' para afrontar los enormes cambios a los que el patrido se veía abocado. Pero no lo logró porque el resto de los barones regionales le cortaron el paso.

También, la popular María San Gil abandonó a Rajoy porque no estaba de acuerdo con la nueva estrategia política de un mayor acercamiento a los nacionalistas y de pactos con Zapatero. Otros medios destacaron también a grupos de críticos, en su día muy cercanos a Rajoy, que también le abadonaron como Juan Costa, Gabriel Elorriaga o Carlos Aragonés, que no compartían las decisiones que tomó el presidente del PP desde el 9-M.

La periodista Lucía Méndez apuntó en su día que "la principal espada de Damocles que pesa sobre el Congreso del PP (en 2008) es que se produzca un cierre en falso de la crisis que aqueja al partido". Algo similar sigue sucediendo en 2015, con las municipales y autónomicas a la vuelta de la esquina; un incierto escenario catalán que dará lugar a unas elecciones generales en las que Rajoy ya señaló a comienzos de año que "si los míos quieren" volveré a ser candidato.

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