Evo Morales reafirma en Tiahuanaco la identidad indígena de su revolución

  • El presidente de Bolivia, Evo Morales, reafirmó hoy la identidad indígena de su revolución política en una ceremonia ancestral celebrada en las ruinas prehispánicas de Tiahuanaco, un día antes de prestar juramento en el Congreso para iniciar su tercer mandato consecutivo, hasta el 2020.

Javier Aliaga

Tiahuanaco (Bolivia), 21 ene.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, reafirmó hoy la identidad indígena de su revolución política en una ceremonia ancestral celebrada en las ruinas prehispánicas de Tiahuanaco, un día antes de prestar juramento en el Congreso para iniciar su tercer mandato consecutivo, hasta el 2020.

Los rituales llenos de simbolismo de esta investidura indígena, la tercera que protagoniza Morales desde que llegó al poder en 2006 y lo revalidó en 2010, tuvieron como testigos a dos jefes de Estado, tres vicepresidentes y otros representantes de decenas de países, además de líderes de movimientos sociales y de pueblos indígenas.

"Hoy es un día histórico, de reafirmación de nuestra identidad, de reafirmación de nuestra revolución democrática y cultural. Estamos viviendo los tiempos de Pachakuti (retorno al equilibrio)", afirmó Morales al comenzar su intervención.

El gobernante centró parte de su discurso en explicar la cosmovisión indígena, pero también aclaró que haber rescatado esa identidad para construir un Estado Plurinacional no significa "un retorno romántico al pasado", sino una recuperación del legado para combinarlo con una modernidad que no dañe al planeta.

Morales, de etnia aimara, sostuvo en su alocución que millones de indios desaparecieron en América durante la época colonial porque, a su juicio, para que existieran el capitalismo y el imperialismo debían desaparecer los indígenas.

Según el mandatario, que no citó sus fuentes, se calcula que unos 140 millones de indios desaparecieron hasta el siglo XVI en Norteamérica, otros diez millones de aztecas murieron en Centroamérica y otro tanto en las minas del Cerro Rico de Potosí (suroeste de Bolivia).

"A pesar de tanto sufrimiento y tanta masacre nunca nos hemos rendido, ni nos hemos dado por vencidos", reafirmó.

Los indígenas, prosiguió, están hoy acá "para gobernar haciendo respetar nuestra Pachamama (Madre Tierra) y despertar la energía comunal".

También citó a los líderes históricos mapuches Caupolicán y Lautaro, que resistieron a la colonia en Chile, y a los jefes indios de Norteamérica, a "Gerónimo, último guerrero apache, al Oso Blanco y a Toro Sentado".

Morales gobierna Bolivia desde el 2006, inició su segundo mandato en 2010 y mañana comenzará el tercero tras haber ganado en los comicios del pasado 12 de octubre con un respaldo del 61,3 % de los votos.

En su discurso, el presidente también pidió frenar "la loca carrera de la destrucción de la Tierra en nombre del desarrollo",

"Este mundo ya no puede soportar tanto sobredesarrollo. En nombre de la modernidad los países industrializados están sobreindustrializando y eso tiene un costo para el planeta Tierra. Estamos yendo a la destrucción de nuestro planeta", advirtió.

El discurso cerró un conjunto de rituales que comenzaron temprano con una "limpieza" a la que Morales fue sometido en el museo del centro arqueológico y ante el monumental monolito Bennet, una efigie de la cultura tiahuanacota de siete metros de alto y 20 toneladas.

Allí fue vestido por los amautas o sabios aimaras con un gorro y una túnica, con figuras repujadas en oro, inspiradas en las vestimentas de ese antiguo imperio andino, cuya cultura vivió entre los años 1580 antes de Cristo y el 1172 de nuestra era.

La vestimenta que lució hoy el mandatario, creada para la ocasión, costó unos 4.000 dólares.

Acompañado por los sabios indígenas, Morales caminó hacia la pirámide de Akapana y el templo de Kalasasaya, en cuya escalinata recibió los mandos del poder indígena y recibió el saludo de las autoridades visitantes y a representantes de movimientos sociales.

Entre los asistentes estuvieron los presidentes de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, y de Trinidad y Tobago, Anthony Carmona, así como los vicepresidentes de Argentina, Amado Boudou; de Bielorrusia, Viktor Sheiman, y la de Perú, Marisol Espinoza.

También acudieron grupos indígenas y miembros de los movimientos y organizaciones sociales de Argentina, Brasil, Chile y Perú, entre ellos las argentinas Madres de la Plaza de Mayo y el chileno Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez.

Marco Riquelme, representante de este último movimiento, dijo a Efe que llegó a Tiahuanaco para ratificar su apoyo "a la exigencia legítima de mar para Bolivia, porque eso profundiza el deseo de integración regional".

La ceremonia en Tiahuanaco, en la que también se mostró la riqueza musical y folclórica del país, concluyó con un desfile de danzas y ritmos para los invitados, que también degustaron la gastronomía andina con un menú que incluyó quinua, trucha, pez surubí y hojas de coca.

El inicio oficial del tercer mandato de Evo Morales tendrá lugar mañana con el juramento del cargo en el Congreso boliviano.

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