Una joven en silla de ruedas se convierte en aspirante a Miss Mundo

La fuerza de voluntad y las gana de vivir eliminan cualquier barrera. Esto esta es la idea que difunde Justine Clarke, una joven de 26 años que aspira a ser la representante de Autralia en el certamen Miss Mundo.

Clarke es rubia, ojos azules y cara angelical, una cualidades que muchas de las aspirantes de este concurso poseen, pero su principal diferencia es su situación personal.

La joven lleva dos años en una silla de ruedas, algo que ha llamado la atención de los medios de comunicación dado que se convierte en la primera candidata a un concurso de belleza en estar en esta situación.

"Una silla de ruedas no me define o me limita. Puedo ser fuerte, femenina y guapa", ha dicho la aspirante a Miss Mundo a 'The Advertiser', un medio de comunicación australiano. "Quiero que la pasarela sea un lugar inclusivo y justo para todo el mundo", añade.

La bella joven no ha querido contar la razón por la que debe utilizar silla de ruedas para desplazarse, solo desea que con su paso por el concurso las trabas en el mundo de la moda vayan poco a poco desvaneciéndose. "Para alguien en una silla de ruedas, poder competir es importante. Realmente espero que envíe un mensaje de que no importa cuál sea la raza, tamaño o discapacidad, lo que te hace diferente. Eres hermosa", afirma la modelo.

Desde la organización de Miss World Australia consideran que la falta de movilidad en las piernas de Justine no es un inconveniente para participar en el concurso, un espíritu que casa bastante con el certamen de belleza máter Miss Mundo, donde se buscan valores sociales más allá de un rostro y un cuerpo bonito.

En España también se hizo historia a través del concurso Miss Mundo ya que en 2016 Ángela Ponce, una joven transexual gaditana, casi se alza con la corona de Miss World Spain siendo ella la primera aspirante transgénero en este concurso. Finalmente la elegida fue Mireia Lalaguna que meses después obtuvo la primera corona de Miss Mundo para nuestro país.