El jefe de Estado francés, François Hollande, ha considerado el galardón un reconocimiento a la "acción decidida" de Santos para lograr la paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). "Francia siempre ha estado a su lado y así seguirá, para que el diálogo se imponga a la confrontación y que triunfe la valentía de la paz", ha dicho en un comunicado.
Para el primer ministro italiano, Matteo Renzi, Santos "se merece el Nobel de la Paz", toda vez que es "un amigo preciado" y "un líder verdadero". Su homólogo portugués, António Costa, también ha apuntado que "los esfuerzos por la paz deben ser reconocidos", mientras que el jefe del Gobierno belga, Charles Michel, ha visto en el Nobel "un tributo al pueblo colombiano, que no pierde la esperanza".
El portavoz de la canciller alemana, Angela Merkel, ha reconocido la labor de Santos para dar una "nueva esperanza" no sólo a su país, sino a toda la región y ha afirmado que el Nobel supone un estímulo para seguir trabajando y poner fin a medio siglo de conflicto armado.
Noruega, país garante del proceso de paz colombiano, se ha pronunciado en boca de su primera ministra, Erna Stoltenberg, quien ha querido felicitar a su "amigo" Santos. El Nobel, ha añadido, "es un impulso para seguir con el proceso".
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