El Govern cederá los pisos de herencias intestadas para destinarlos a personas vulnerables

La Generalitat cederá a entidades sociales los pisos de herencias intestadas --sin testamento-- para destinarlos a personas "en situación de emergencia social" o riesgo residencial, en vez de venderlos como se hacía hasta ahora, y lo hará con un protocolo puesto en marcha este jueves con la entrega de 32 inmuebles a la Taula del Tercer Sector Social.

Lo han explicado el vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Oriol Junqueras; la consellera de Gobernación, Administraciones Públicas y Vivienda, Meritxell Borràs, y el presidente de la Taula, Oriol Illa, que al firmal el convenio han coincidido en calificarlo como "un paso más" contra la exclusión residencial.

Desde ahora se cederá indefinidamente todo piso susceptible de ser habitado y que provenga de una persona muerta sin hacer herencia ni testamento, en vez de optarse por subastar el inmueble y destinar el dinero a fines sociales y culturales como se hacía hasta ahora --ambas opciones se recogen en el Código Civil catalán--.

Se optará por mantener la vivienda en propiedad pública ante los grandes problemas actuales de acceso a la vivienda, y la Agència de l'Habitatge de Catalunya gestionará estas primeras 32 fincas, distribuidas en 15 municipios, que se asignarán a las entidades de la Red de vivienda de inserción que formen parte de la Taula.

BRECHA ENTRE PRECIOS E INGRESOS

Oriol Junqueras ha dicho que la Generalitat pagará las obras de rehabilitación que sean necesarias, y ha lamentado que el derecho a la vivienda no se asume "con plenitud" porque hay una gran diferencia entre los precios y la capacidad salarial o de ingresos de muchos ciudadanos.

Seis de las fincas cedidas este jueves están en la ciudad de Barcelona, cinco en l'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), tres en Balaguer (Lleida) y dos en Tortosa (Tarragona), y uno en Canovelles, Ripollet, Sallent, Sant Feliu de Llobregat, Viladecans (Barcelona), Breda, Palamós (Girona), Lleida, Àger, Artesa de Segre, Tremp (Lleida), El Vendrell, L'Arboç, Cambrils, Salou y Vila-Rodona (Tarragona).

Estas viviendas se sumarán a las 250 que ha cedido la Generalitat a las entidades desde marzo, cuando se comprometió a ceder 500 pisos en esta legislatura para contribuir a cubrir las necesidades de vivienda social, que la Taula del Tercer Sector estima en 770 pisos, y Oriol Illa ha destacado que las entidades cuentan con hasta 1.800 viviendas de diferentes procedencias.

Illa ha celebrado la firma del protocolo y ha subrayado que la vivienda es para las entidades "una de las principales políticas sociales", ya que, sin ésta, difícilmente se puede construir la autonomía de las personas.

Ha lamentado que España es uno de los países europeos con más dificultades para tener un parque de vivienda pública, lo cual "no es solo culpa de las administraciones", sino que también ve poca disposición de los grandes tenedores, como entidades financieras e inmobiliarias.

MERITXELL BORRÀS

Meritxell Borràs ha valorado la colaboración con las entidades, y ha calificado de "máxima" la responsabilidad de la administración ante el problema de la vivienda, cuya solución requiere combinar voluntad política, recursos, información para la ciudadanía y herramientas legales, ha dicho.

También ha constatado que se han suspendido leyes que eran útiles --como una parte de la Ley 24/2015 de la emergencia habitacional--, pero están impulsando "de forma muy rápida" una ley alternativa que esperan que vea pronto la luz en el Parlament.