Delegados de ambos sindicatos se han concentrado este miércoles frente al edificio sindical para condenar la muerte de este trabajador, al que le faltaban sólo dos meses para jubilarse. Se trata del tercer accidente laboral ocurrido en la provincia en lo que va de año.
Según las primeras indagaciones de los sindicatos, se trata de un accidente "fortuito" al salirse el vehículo de la pista forestal por la que circulaban el fallecido y su hermano, "que resultó ileso", sin que existan "indicios de que el vehículo estuviera en mal estado".
El secretario general del sindicato de Industria de CCOO, Pedro Redondo, ha considerado que la Administración central "tiene gran parte de responsabilidad en este trágico suceso, ya que debería aplicar los coeficientes reductores de jubilación para la actividad que realizaba este trabajador de 63 años, considerada de alto riesgo".
El fallecido era especialista forestal y se dedicaba a extraer biomasa con animales de carga del medio natural, según los datos que baraja el sindicato, que critica que "personas con más de 60 años realicen este tipo de tareas, con el peligro que conlleva para su salud".
CCOO Granada lleva desde 2015 reivindicando que la plantilla de la Agencia de Medio Ambiente y Agua, que desempeña sus labores en el medio natural en actividades consideradas penosas, tóxicas e insalubres, pueda obtener un adelanto de la edad de jubilación, con la aplicación de los coeficientes reductores.
Por este motivo, piden al Gobierno que retome la negociación con los agentes sociales para dar luz verde a esta medida y "evitar así muertes innecesarias".
Por su parte el presidente del comité de empresa de la Agencia de Medio ambiente y Agua (Amaya), Ángel Morales (UGT), recuerda que actualmente la edad de jubilación de este colectivo es la misma que para cualquier otra actividad profesional.
Sin embargo, "la propia actividad de prevención y extinción de incendios forestales tiene una elevada siniestralidad y las condiciones laborales presentan una dureza que impiden que los trabajadores lleguen a la edad de jubilación en sus puestos habituales". Normalmente, tienen que ser reubicados en otras actividades.
Pese a ello, UGT censura que se sigan produciendo fallecimientos "de trabajadores que por su edad no deberían estar haciendo trabajos selvícolas de prevención de incendios, que tienen una gran exigencia física y presentan numerosos riesgos".
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