Así lo ha destacado Algar, en declaraciones a Europa Press, recordando que Medio Ambiente ha abierto un expediente sancionador, aún no concluido, a la secadora de orujo responsable del vertido detectado el pasado lunes a la altura de El Carpio (Córdoba) y que ya ha provocado la muerte por asfixia de multitud de peces entre dicha localidad y la capital cordobesa.
Ello conlleva, según ha señalado Algar, "analizar la causas" del vertido, su "capacidad contaminante" y "los daños al medio ambiente" que ha provocado, en base a lo cual se determinará el resultado del referido expediente sancionador, "en coordinación" con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), que es la que "tiene las competencias de la cuenca" y que le ha abierto a la orujera su propio expediente sancionador.
A juicio del delegado de Medio Ambiente de la Junta, dicha coordinación con la CHG es fundamental, no solo en el plano competencial, sino también "para que no haya solapamientos" entre los procedimientos iniciados por ambas administraciones.
Entre tanto, se procede a analizar el agua del río Guadalquivir en las zonas afectadas por el vertido y también los peces muertos por efecto directo del mismo, entre otras variables, pero siempre con bajo la premisa, según ha subrayado Algar, de que, una vez establecidos los caños causados, "el que contamina, paga".
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios