Según ha informado el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), dicho organismo, dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, ha seguido de forma integral el ejercicio desde su Sala de Emergencias (Salem), realizando la supervisión de la instalación y de las actuaciones del titular para la recuperación de las condiciones de seguridad y para la adopción de medidas de protección radiológica.
El ejercicio, iniciado a las 09,34 horas, ha comenzado con la comunicación de un fallo en el sistema de control de efluentes líquidos del edificio auxiliar de acondicionamiento que ha llevado a un vertido de agua en el exterior del mencionado edificio, procedente de un grifo de agua corriente, que había quedado abierto en uno de los laboratorios.
El vertido no ha afectado a los residuos existentes en el edificio ni ha tenido impacto en el exterior de la instalación. Además, se ha simulado la descontaminación de un trabajador que resultó contaminado durante las labores de recogida de agua.
Durante el simulacro, Enresa ha llegado a declarar "alerta de emergencia en el emplazamiento" de su Plan de Emergencias Interior y el CSN ha activado de forma inmediata su Organización de Respuesta ante Emergencias (ORE) en modo 1, que implica la activación de su Sala de Emergencias y del equipo de retén. Un suceso de esta naturaleza hubiera sido clasificado como nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).
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