En concreto, el portavoz del Instituto Almenara --una de las organizaciones firmantes junto al SAT, el Pacma o la Confederación de Asociaciones Independientes de Sevilla (CAIS), entre otras--, Rafael Sanmartín, ha precisado a Europa Press que pretenden que la petición de cautelar se mantenga hasta que se confirme la paralización plena, para la cual "existen motivos de sobra: nos van a dejar sin agua a media Andalucía".
"No queremos que Doñana corra ningún riesgo, para lucro de una empresa privada; estimamos que la división en cuatro proyectos de una sola obra, si no es ilegal, violenta excesivamente la ley y la justicia, y lo prueba que eso se ha hecho así para evitar la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), a la que sólo se teme si se está seguro que será negativa", sostienen.
Concretamente, el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, recuerda que el Parque Nacional de Doñana es Patrimonio de la Humanidad y Reserva de la Biosfera, "las más importantes nominaciones existentes a nivel universal, dada su variedad ecológica y su acción beneficiosa sobre la vida animal y vegetal y sobre el clima".
"Queda claro, pues, que la posible pérdida de este pulmón mundial, sería una catástrofe irreversible para el mundo y en especial para Andalucía, zona la más cercana y, por tanto, la más beneficiada actualmente y la que corre mayor peligro", indica la coordinadora.
Argumenta Doñana Live que el 'fracking', "como ha quedado demostrado en diversas ocasiones, la más reciente en la provincia de Jaén, donde se vieron obligados a suspenderlo, provoca movimientos de tierra similares a terremotos de baja y media intensidad, pero muy dañinos al producirse muy cerca de la superficie".
UN SOLO TEMBLOR SERÍA "CATASTRÓFICO"
En el caso de Doñana "uno solo de estos temblores resultará catastrófico", puesto que en el subsuelo se localizan tres capas freáticas: la primera, de escaso espesor, procede de las lluvias y forma los 'lucios' (pequeñas lagunas) en las hondonadas; la segunda es bastante voluminosa y es de agua salada, procedente de filtraciones y del mar que existió en tiempos; y la tercera es la más voluminosa, procede de las sierras al norte, de agua potable.
Esta composición es lo que mantiene el equilibrio actual en el parque, "muy delicado e inestable", porque lo que separa las tres capas es tierra de aluvión, fácilmente removible. Es decir, "con sólo una falla en alguna de ellas el agua de las tres se mezcla, con lo que toda se saliniza, lo que supone la muerte automática de la vida en el parque, al desaparecer el agua dulce".
Sin embargo, para los reclamantes el mayor problema es que los Parques Nacional y Natural se encuentran también sobre parte del acuífero Niebla-Posadas, extensa bolsa de agua potable de dónde nacen casi todos los ríos, desde el Odiel hasta cerca del Guadiana Menor, "es decir, más de media Andalucía". Su salinización o envenenamiento "supone la imposibilidad de contar con agua potable en toda esta amplia zona".
Por todo ello, solicitan al Ministerio Fiscal estudiar la posibilidad de accidente, "aunque fuera remota", y, si se confirma, "se prohíba absolutamente la referida obra y cualquier otra que pueda poner en peligro la supervivencia del parque y la afección de cualquiera de los acuíferos citados".
También piden que se analice el por qué presentar la obra como si fueran cuatro distintas, "cuando se trata a todas luces de una sola", y si específicamente esta forma de presentación permite esquivar la DIA, que se depuren responsabilidades y se actúe "enérgicamente" contra los infractores y los responsables en general.
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