LAS RANAS QUE SE ADAPTAN A LOS PESTICIDAS SON MÁS VULNERABLES A LOS PARÁSITOS

Los anfibios pueden desarrollar una mayor tolerancia a los pesticidas, pero esa adaptación puede hacerlos más vulnerables a los parásitos, según un estudio de siete investigadores de Estados Unidos basado en 15 poblaciones de ranas de bosque (‘Lithobates sylvaticus’).
El estudio, publicado en la revista ‘Evolutionary Applications’, apunta que las ranas analizadas que aumentan su tolerancia a los pesticidas tienen una mayor susceptibilidad a un gusano parásito (‘Echinoparyphium’).
“Recientemente, hemos comenzado a entender que los anfibios pueden evolucionar rápidamente a la tolerancia a químicos como los pesticidas, que en apariencia es una buena noticia. Pero ahora viene la mala noticia: con esa tolerancia hay una compensación, que es que se vuelven más susceptibles a los parásitos que, en el caso de ranavirus, pueden acabar con poblaciones enteras de anfibios”, explica Rick Relyea, del Intituto Politécnico Rensselaer (Estados Unidos).
Una investigación anterior, dirigida por Jessica Hua, profesora asistente de la Universidad de Binghamton (Estados Unidos), mostró que los anfibios pueden evolucionar tolerancia a los pesticidas en una de dos maneras: los que viven cerca de la agricultura tienen una tolerancia de base más alta y la transmiten ge generación en generación y, si se exponen a niveles bajos de plaguicidas en los primeros años de vida, los que habitan lejos de zonas agrícolas adquieren esa tolerancia a los pesticidas en unos pocos días, lo que se conoce como tolerancia inducible.
"Si bien es positivo que los anfibios puedan evolucionar tolerancia a los productos químicos utilizando múltiples mecanismos, es importante tener en cuenta que los plaguicidas no son los únicos que causan estrés", apunta Hua, quien añade que estos animales “están disminuyendo en todo el mundo y otros factores de estrés, como los parásitos, pueden interactuar con los plaguicidas para contribuir a estas disminuciones".
"A lo largo de su vida, los anfibios encuentran muchos tipos diferentes de parásitos y las respuestas específicas de los parásitos que detectamos resaltan la complejidad de las interacciones pesticida-parásito", apunta Jason Hoverman, profesor asociado de Silvicultura y Recursos Naturales en la Universidad Purdue (Estados Unidos).
“LA NATURALEZA ES COMPLEJA”
Para entender si el uso del suelo o la tolerancia a los pesticidas tiene un coste cuando se enfrentan a otros factores de estrés como los parásitos, el equipo identificó 15 poblaciones de ranas de bosque que varían en su proximidad a zonas agrícolas y exhiben una tolerancia básica o inducible. Entonces, midieron la relación entre el uso de la tierra, las respuestas evolutivas a un pesticida y la susceptibilidad a dos parásitos comunes: un gusano trematodo y un ranavirus.
Los resultados mostraron que la susceptibilidad de los anfibios a los parásitos estaba relacionada con su proximidad a la agricultura y sus respuestas evolutivas al plaguicida. Las ranas de bosque que vivían más cerca de cultivos con una alta tolerancia inicial tenían una presencia de trematodos más bajas que las poblaciones que vivían lejos de la agricultura con tolerancia a pesticidas inducible.
En contraste con el ranavirus, un patógeno altamente virulento capaz de diezmar las poblaciones de anfibios, las poblaciones que viven cerca de la agricultura con alta tolerancia inicial tenían cargas virales más altas que las poblaciones lejos de la agricultura con tolerancia inducible.
"Nuestros resultados sugieren que no basta con considerar los efectos de contaminantes o parásitos en aislamiento. La naturaleza es compleja", apunta Hua, que subraya que “no sólo diferentes factores de estrés interactúan de maneras que pueden ser difíciles de predecir, sino que las respuestas evolutivas a un factor estresante pueden dar forma a respuestas de los anfibios a otros factores de estrés".

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