Sabanés cree que ningún futuro gobierno revocaría el Plan A porque responde a los requerimientos de Bruselas

La Junta de Gobierno ha aprobado definitivamente este jueves el Plan A, que incluye treinta medidas tras estudiar 244 alegaciones. El plan, dotado con 543,9 millones de euros, ha sido presentado este jueves por la alcaldesa, Manuela Carmena, y los delegados Sabanés, José Manuel Calvo y Carlos Sánchez Mato.

Inés Sabanés ha añadido que además "este plan no sale de la nada" ya que el Gobierno municipal ha estudiado planes anteriores de calidad de aire y de movilidad. Algunas medidas que para algunos son "una sorpresa" y que se han encontrado "con mucha oposición" se apuntaban ya en anteriores planes. "Otra cosa es que no se hicieran", ha apostillado la concejala refiriéndose, por ejemplo, a la extensión del Área de Prioridad Residencial de Centro.

También se ha desmarcado de las críticas hacia los carriles bus por un sector de la oposición. "Cuestionar ahora los carriles bus creo que no es plan", ha contestado al ser preguntada por el de la calle Alcalá, que se quedará tras haberse puesto en marcha este verano durante las obras de mejora de la línea 5 de Metro.

La alcaldesa, Manuela Carmena, por su parte, ha argumentado que se llama Plan A "porque no hay plan B". "Tenemos una enorme responsabilidad como generación, como sociedad, para evitar los efectos del cambio climático. Está en nuestra mano", ha indicado.

Carmena ha afirmado que la sociedad madrileña acepta las medidas del Plan A como se extrae de los sondeos de opinión a los ciudadanos. "Nos apoyan y nos dicen que adelante", ha remarcado. La regidora ha abogado por tener una "mirada curiosa" para gestionar. "Sólo con energía, afán de cambio, responsabilidad y evaluación se puede gobernar bien", ha resumido. Carmena, por otro lado, ha considerado que el Plan A forma parte de la "política poliédrica" impulsada por el equipo de Gobierno, una propuesta transversal que encierra el proyecto de ciudad.