LA ACIDIFICACIÓN DE LOS OCÉANOS ACELERA LA EROSIÓN DE LOS ARRECIFES DE CORAL

Un equipo de científicos que estudió los arrecifes de coral con niveles de dióxido de carbono (CO2) naturalmente altos en Papúa Nueva Guinea encontró que la erosión del hábitat esencial se acelera en esas aguas altamente acidificadas, incluso a medida que el crecimiento coralino continúa disminuyendo.
La investigación, llevada a cabo en el seno del Cimas (Instituto Cooperativo de Estudios Marinos y Atmosféricos de la Universidad de Miami) y la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica), de Estados Unidos, y el Instituto Australiano de Ciencias Marinas, tiene importantes implicaciones para los arrecifes de coral en todo el mundo a medida que el océano se vuelve más ácido por el cambio climático.
El estudio, publicado en la revista ‘Proceedings of the Royal Society B’, midió los cambios en el hábitat estructural en dos arrecifes situados en aguas volcánicamente acidificadas de Papúa Nueva Guinea y, por primera vez, halló una mayor actividad de gusanos y otros organismos que atraviesan la estructura del arrecife, lo que se traduce en una pérdida del armazón que es la base de los ecosistemas de arrecifes de coral.
Estos arrecifes pueden ser análogos naturales de cómo serán los de dentro de 100 años si el CO2 sigue aumentando en el planeta y las condiciones de acidificación de los océanos continúan empeorando.
“Éste es el primer estudio que demuestra que la acidificación del océano es un doble asalto frontal a los arrecifes de coral, simultáneamente frenando el crecimiento del esqueleto y acelerando la velocidad a la que se erosionan los hábitats de los arrecibes”, apunta Ian Enochs, ecólogo coralino del Cimas y del Laboratorio Oceanográfico, y Meteorológico Atlántico de la NOAA y autor principal del estudio.
DOS AÑOS DE ANÁLISIS
Enochs y sus colegas colocaron fragmentos de esqueleto de coral junto a los arrecifes analizados durante dos años para permitir que diversas comunidades coralinas se asentaran sobre ellos y entender cómo los arrecifes responden a las condiciones de acidificación oceánica.
Usando tomografías computarizadas de alta resolución similares a las tomadas en los hospitales, los científicos crearon modelos tridimensionales de los esqueletos de coral para ver los agujeros dejados por gusanos y otros organismos. Estos escaneos les permitieron medir la diferencia entre el nuevo material de coral añadido por los organismos calcificantes y el material de coral perdido por la erosión natural.
El análisis encontró que una pérdida neta de esqueletos de los arrecifes de coral estaba ocurriendo debido al aumento de la erosión y que los armazones de arrecifes en esta región comenzarán a disolverse en el punto de inflexión del pH de 7,8.
"En estos arrecifes, el dióxido de carbono de las fuentes volcánicas subterráneas burbujea a través del agua, creando condiciones que se aproximan lo que el resto de los océanos del mundo experimentará debido a la acidificación del océano", comenta Enochs, quien concluye: "Éste es el primer estudio que reúne todos los procesos de acidificación oceánica de los arrecifes de coral, al tiempo que mira los diferentes organismos que crecen y erosionan los hábitats de los arrecifes, y sus efectos netos entre sí a lo largo del tiempo".

Mostrar comentarios