Así argumenta Gadafi para no irse

Al Qaeda: El mandatario libio insiste en que tras la revuelta están "células durmientes" del grupo terrorista que ahora han movilizado y engañado a algunos libios para ponerse de su parte. "Los manifestantes están al servicio de Bin Laden (…). Al Qaeda ha llegado a algunas partes de nuestro país, matando a vuestros niños. Ellos no se preocupan de la agricultura de nuestro pueblo, solo quieren matar", ha dicho Gadafi. Drogadictos: Es solo uno de los apelativos que ha empleado Gadafi para definir a quienes se han unido al alzamiento contra el régimen. Asegura que son jóvenes que se drogan influidos por los terroristas y que sus padres deberían encargarse de ellos. También les ha llamado "borrachos" y "ratas". Petróleo: Gadafi sabe que el mundo tiembla por los posibles problemas de abastecimiento del oro negro y el incremento en el precio de la gasolina. Sabe que su fuerte son las refinerías del país, que de hecho intenta recuperar a base de bombas después de que los rebeldes se hayan hecho con las más destacadas de Ras Lanuf o Brega.

El líder libio intenta convencer a su población de que EEUU y otros países occidentales pueden intervenir militarmente en su país solo por sus intereses petroleros. "Preparémonos para defender Libia, preparémonos para defender el petróleo. Nosotros podemos derrotarlos con el pueblo armado", dijo después de saberse que EEUU no descartaba una incursión militar. Yo no mando: El régimen de Libia es una "República de Masas", término acuñado por Gadafi unos años tras acceder al poder. Oficialmente, el poder está en manos del pueblo y en eso se apoya el coronel para argumentar que no puede dimitir porque no tiene ningún cargo. Sin embargo, al mismo tiempo se presenta ante sus seguidores como un líder y sus fotos inundan los carteles propagandísticos repartidos por el país. Para él, su pueblo le quiere y luchará por él hasta la muerte. Medios mentirosos: Muamar al Gadafi defiende que los medios occidentales y también los árabes están mintiendo sobre lo que sucede en Libia. La cerrazón del régimen que ahora ha invitado tanto a la ONU como a los medios a ver lo que está ocurriendo con sus propios ojos, sigue impidiendo conocer la verdad de todo lo que sucede en la guerra civil de Libia. Los periodistas consiguen llegar a algunas zonas controladas por los rebeldes (como su sede en Bengasi), pero llegar a la capital (bastión de Gadafi) es otro cantar. Inmigración:"Libia tiene un papel para la estabilidad" internacional, subrayó en una entrevista emitida por el canal de televisión "France 24" y añadió que "se espera que Libia impida que millones de negros atraviesen el Mediterráneo para ir a Europa, a Italia o a Francia". Muerte: El 22 de febrero Gadafi amenazó con ejecutar a los manifestantes contrarios al régimen. De hecho, La Haya ha abierto una investigación por presuntos crímenes contra la Humanidad a petición de la ONU.

Y es que las fuerzas aéreas leales al régimen bombardean día sí día también las ciudades tomadas por los rebeldes e incluso lanzaron bombas contra los manifestantes en Trípoli, según denunció Al Jazeera. Además, la Federación Internacional de Derechos Humanos ha denunciado la irrupción de soldados de Gadafi en los hospitales de la capital matando a los heridos.