Los niños del 11S honran a sus seres queridos 15 años después de la tragedia

  • Más de 3.000 niños y jóvenes perdieron a un padre en el ataque terrorista más mortífero cometido en suelo americano.

    Muchos de ellos han decidido honrar a sus padres desaparecidos con carreras profesionales centradas en ayudar a los demás y el servicio público.

Los niños del 11S honran a sus seres queridos quince años después de los ataques
Los niños del 11S honran a sus seres queridos quince años después de los ataques
Don Emmert/AFP/Getty Images
M.G./Agencias

Eran niños, o ni siquiera nacido aún, cuando los terroristas sembraron de dolor y muerte Estados Unidos en los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.

Más de 3.000 niños y jóvenes perdieron a un padre en el ataque terrorista más mortífero cometido en suelo americano, a los que comenzó a conocerse como los niños del 11-S.

Ante la cercanía del 15 aniversario de los ataques, estos niños que ahora son adultos o están cerca de serlo, muchos han comenzado a contar su historia de superación del dolor.

Muchos han encontrado fuerza en el deseo de honrar a los padres que perdieron mediante formas tan variadas como el trabajo con los refugiados, el estudio de las causas que condujeron a los ataques o la búsqueda de una carrera deportiva de éxito. A continuación, algunas de sus historias recogidas por Associated Press.Comunicar tragedias

Lindsay Weinberg ha encontrado su misión en un trabajo de los más difíciles que existen, como es notificar a las familias el fallecimiento de un ser querido, a veces en circunstancias violentas.

Weinberg tenía 12 años cuando la oficina del médico forense de la ciudad de Nueva York, donde ahora trabaja, comunicó a su familia en 2002 que habían identificado los restos de su padre entre las víctimas del 11S.Luchadora profesional

Thea Trinidad ha querido seguir de cerca los pasos de su padre, un ex luchador que no se inmutó cuando su hija comenzó a mostrar interés por la lucha.

Solamente tenía 10 años cuando oyó a su padre llamar a su madre para decirle adiós desde la torre norte del World Trade Center, donde trabajaba como analista de telecomunicaciones.

En 2011, la revista Pro Wrestling Illustrated nombró A Thea Trinidad (que pelea con el nombre de Rosita) Inspirational Wrestler of the Year. Recuerda como se le disparó el pulso cuando volvió a pisar el suelo del Madison Square Garden en 2014, ya como luchadora profesional, rememorando la primera vez que había estado allí con su padre.Servicio público

Cuando tenía seis años Michael Massaroli perdió a su padre, un analista financiero. El dolor le sacudió junto a su madre, que había dado a luz a un bebé dos meses antes de la tragedia.

Tras el paso de los años se sintió conmovido al ver cómo la población, gente desconocida, se había volcado en aquellos días horribles para mostrarles su apoyo y ofrecerles ayuda. Eso le llevó a querer dedicarse al servicio público.

Ahora, con 21 años y recién licenciado en la Universidad George Washington, obtuvo su primer trabajo en una firma de Washington que ayuda a las campañas políticas manejar adecuadamente sus finanzas. Massaroli espera que, con el tiempo, puede encontrar trabajo en el gobierno como asesor o ayudante.Comprender el horror

Alexandra Wald estaba en su primer día de curso cuando su padre, el agente de bolsa Victor Wald, murió en el World Trade Center.

Tenía 13 años y desde ese momento quería entender que estuvo detrás de los terribles ataques terroristas. Se empapó de libros sobre el tema y estudió cuatro años de lengua árabe en la universidad, hasta licenciarse en relaciones internacionales para poder trabajar en tareas de inteligencia.

Ahora, con 28 años, trabaja en un proyecto de seguridad cibernética para un contratista de la Administración de Servicios Generales en Washington.

Mostrar comentarios