Detienen a 400 chinos de una secta que anunciaba el fin del Partido Comunista y el fin del mundo

Las autoridades chinas no se andan con chiquitas. Esta semana han detenido a 400 miembros de la secta 'Dios Todopoderoso' por anunciar el fin del mundo el próximo 21 de diciembre. Sin embargo, no era la única razón para desmantelar al grupo.

"Mantener la estabilidad". La policía de Quinghai (China) ha explicado que la secta es la responsable de hasta ocho disturbios aplacados en la capital de la región. Como explica la televisión nacional CCTV, la secta 'Dios Todopoderoso' contaba con una infraestructura poco convencional.

"Varios de sus refugios han sido desmantelados, y se han decomisado más de 5.000 banderas, CDs, DVDs, libros, ordenadores, impresoras, megáfonos y teléfonos móviles", como recoge el Global Times.

Dos pájaros de un tiro. Las autoridades han explicado que el colectivo tenía otros intereses contrarios al Partido Comunista de China (PCC), el único representado en las instituciones del país. La provincia dónde se han detenido a los supuestos sectarios tiene un importante representación tibetana, que defiende la autonomía de la región montañosa.

"El Gran Dragón Rojo". Además del apocalipsis, desde la secta anunciaban el final del Gran Dragón Rojo, nombre en clave que usaban para el PCC. Los informes policiales dicen que los miembros de 'Dios Todopoderoso' anunciaba que el cambio de ciclo también conllevaría un inevitable cambio de régimen.