El 'efecto Wilders' se desinfla a solo 24 horas para que los holandeses acudan a las urnas. La crisis diplomática entre Holanda y Turquía no ha tenido el efecto esperado para el candidato ultranacionalista, que pensó que esta tensión le ayudaría a sumar votos.
Si hace unas semanas todas las encuestas le daban como ganador, la última sitúa al actual partido en el poder del primer ministro Mark Rutte como vencedor de los comicios. Así el partido VVD lograría entre 24-28 escaños, frente a los 20-24 de la formación de Wilders. A unos días de la votación del miércoles, la contienda no puede estar más apretada.
En paralelo al descenso de Wilders dos fuerzas proeuropeístas como los liberales progresistas del D66 y los Verdes de GroeLinks están experimentando una fuerte subida en la intención de votos.
En las elecciones holandesas hay 28 partidos inscritos, de los cuales alrededor de la mitad tiene oportunidades de alcanzar un escaño. Además del oficialismo actual, el resto de los aspirantes ya anticipó que no gobernará con Wilders.
Los partidos más fuertes
El VVD del primer ministro, Mark Rutte, aspira a obtener entre 23 y 27 escaños. Su compañero, el partido laborista de centro-izquierda PvdA, que en la actualidad cuenta con 35 escaños, podría perder en torno al 70 de los escaños que tienen actualmente.
Los partidos medianos que podrían obtener entre 10 y 20 escaños son la Democracia Cristiana (CDA) y el Partido socioliberal y progresista Demócratas 66 (D66), ambos con representación parlamentaria desde los años sesenta.
También están el Partido Socialista (SP), más radical, y el de Izquierda Verde (GL), en rápido crecimiento y que aspira a cuadruplicar sus escaños.
Los partidos pequeños que se estima que obtendrán menos de 10 escaños incluyen dos partidos religiosos, el Partido por los Animales (PvdD), el partido 50Plus para jubilados, el partido antieuropeo Foro para la Democracia (FvD) y el Denk (Piensa), que representa en su mayoría a los inmigrantes musulmanes.
Y hay un partido que se llama Niet Stemmers (No Votantes) que intentará atraer al 25% de votantes holandeses que piensan abstenerse. El partido promete que sus representantes no votarán nada en el Parlamento.
Las elecciones del miércoles son de las más fragmentadas en los últimos años. Se prevén unas complicadas negociaciones para formar gobierno, que probablemente requeriría de cuatro o cinco partidos para lograr una mayoría.
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