Alejandro Cao de Benós es el único funcionario occidental del régimen de Corea del Norte. Es delegado especial del régimen y actúa como propagandista ante los medios españoles y de otros países de occidente.
Cao de Benós ha explicado en una entrevista concedida al periodista Lartaun de Azumendi, de 'La Noche' de COPE que las últimas amenazas nucleares del régimen de Pyongyang, se tratan de una "advertencia a Estados Unidos, que está haciendo maniobras con submarinos nucleares cerca de la frontera de Corea del Norte y que están utilizando fuego real".
El funcionario de Corea del Norte, que ha terminado perdiendo los papeles durante la entrevista y colgando el teléfono, ha intentado explicar que que el hermetismo de Corea del Norte es una forma de evitar que el capitalismo entre en el país, y tratar de todo lo que se produzca se reinvierta en el país.
A su juicio, en Corea del Norte "está en el pueblo y no en los banqueros". Y la imposibilidad de los norcoreanos a crecer con sus negocios privados la explica Cao de Benós arguyendo que "si el pequeño empresario aspira a más, se crea desequilibrio social".
Además, Alejandro Cao de Benós ha dicho que en Corea del Norte sí existe la propiedad privada, pero que "es lo que se hereda de los padres, como un reloj o un libro".
Según Cao de Benós, en Corea del Norte no se permiten medios de comunicación privados e independientes porque en el país asiático los medios son un instrumento de educación.
En cuanto a la libertad religiosa, Cao de Benós se ha atrevido a decir que sí se permite la libertad católica, pero que no depende del Vaticano, sino del propio régimen. En Corea del Norte no se le permite a los católicos que le llegue el mensaje del Papa Francisco.
¿Un paraíso?
Cao de Benós ha asegurado que ahora mismo en Corea nadie pasa hambre, pero ha reconocido que el país atraviesa una difícil situación agraria y que el bloque de Estados Unidos también forma parte de los problemas.
Otra de las limitaciones del régimen comunista de Corea del Norte es la ausencia de libertad para registrar partidos políticos contrarios a las ideas al régimen. Aquí, Cao de Benós, alterado, ha contado que para difundir las ideas políticas hay que integrarse en el partido que ya existe. Por lo que no se permite un mensaje contrario.
En cuanto a los campos de concentración en los que se encuentran encerrados miles de coreanos, y que en Corea del Norte los llaman "campos de reeducación", el funcionario español de Corea del Norte los ha equiparado con las prisiones españolas, pero que allí se utilizan para que "la persona que haya pagado un delito lo pague sirviendo al pueblo".
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