El grupo terrorista ha nombrado "por unanimidad" al muláAkhtar Mohamed Mansur como nuevo líder de los talibanes, sucediendo así a Mohammad Omar, quien murió en 2013, según trascendió a los medios internacionales esta semana.
El nuevo emir de los fundamentalistas religiosos era el número dos del anterior líder y uno de los fundadores del movimiento creado durante la década de 1990. El mulá es una de las figuras más prominentes de la organización, de la cual ejerció el cargo de ministro de Aviación Civil y de Transporte del movimiento talibán entre 1996 y 2001.
Mansur no ha pasado desapercibido para la ONU, que ya recogió su historial en un documento sobre la situación de Afganistán elaborado en 2011. Involucrado en narcotráfico, ocupó distintos cargos en la organización, siendo subjefe de la 'shura', la cúpula suprema de los talibanes, y dirigente del consejo del movimiento y encargado de asuntos militares, los puestos más destacados dentro de la banda terrorista.
La cúpula de la organización nombró también a los adjuntos de Mansur, el muláHaibatula Ajundzada, exjefe de los tribunales talibanes, y aSirajuddin Haqani, hijo de Jalaludin Haqani, líder de una influyente rama talibán muy implantada en la región.Posible división dentro de la organización
La pujante participación criminal en el concierto internacional del Estado Islámico está restando protagonismo a los talibanes, acostumbrados hasta hace poco a monopolizar los ataques y atentados con justificaciones religiosas de por medio.
Además, muchos de los talibanes descontentos con el devenir del grupo se han pasado a las filas del grupo yihadista suní,que busca extender su califato a Afganistán, tras proclamarlo en los territorios bajo su control en Siria e Irak.
A ello hay que sumarle las diferencias que existen dentro del seno del grupo yihadista, en el que hay miembros que no están muy de acuerdo con la elección deMansur como nuevo jefe.
Sin ir más lejos, en su primer discurso como jefe de los talibanes, Mansur llamó a la unidad de la organización, pues tal y como apuntó,la división sólo satisfaría a sus enemigos.
"Nuestro objetivo es aplicar la ley islámicay la yihad continuará hasta que eso sea una realidad", amenazó durante un alegato de algo más de media hora.
Las suspicacias de sus iguales estarían motivadas por el carácter reformista y pragmático de Mansur, quien en más de una ocasión se ha mostrado partidario de avanzar en las conversaciones de paz con el Gobierno de Afganistán en las que está intermediando Pakistán.
Pakistán, acusada por Afganistán de servirse de los talibanes para luchar contra las fuerzas de la OTAN, ya anunció un aplazamiento de las negociaciones de paz a petición del propio grupo, que estaba a la espera de elegir a su nuevo líder.Una muerte en extrañas circunstancias
Si bien en un principio, los portavoces de los talibanes apuntaban a la edad como motivo de la muerte del mulá Omar, los detractores del nuevo líder han salido para cuestionar dichas explicaciones y algunos incluso señalan a Mansur como autor de una conspiración para acceder al poder.
Fidai Mahaz, un grupo escindido de los talibán, asegura que el mulá Omar murió envenenado justo después de que decidiera fundar un enlace enQatar,una decisión con la que no estaba a favor Mansur, quien, según este grupúsculo, habría sustituido las medicinas del anterior líder por un veneno que iría acabando con su vida poco a poco.
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