Esta madre perdió a sus cuatro hijos por distintos tiroteos en EEUU

    • Shirley Chambers ha perdido a sus cuatro hijos en menos de 20 años por las armas.
    • Se calcula que cada año mueren en EEUU unas 30.000 personas por disparos.
Shirley Chambers, durante la entrevista con la CBS tras haber perdido a sus cuatro hijos por la violencia armada en EEUU.
Shirley Chambers, durante la entrevista con la CBS tras haber perdido a sus cuatro hijos por la violencia armada en EEUU.
Cadena estadounidense CBS
M.T.T.
M.T.T.

Ronnie, 33 años, asesinado en una furgoneta aparcada en 2013. Carlos, 18 años, muerto por herida de bala tras una pelea de instituto en 1995. Latoya, 15 años, muerta por un disparo cuando se encontraba en la entrada de un edificio de viviendas en 2000. Jerome, 23 años, asesinado cuando esperaba de pie junto a una cabina telefónica en 2000.

Cuatro hermanos, cuatro muertos por heridas de bala en Estados Unidos. Los dos últimos, Latoya y Jerome, únicamente murieron con tres meses de diferencia. Shirley Chambers es la madre de estos jóvenes. Al último de los hijos que le quedaban vivos, Ronnie, tuvo que enterrarlo el fin de semana pasado después de que le quitaran la vida a punta de pistola cuando permanecía en una furgoneta aparcada.

"Estoy completamente perdida (...). ¿Qué he hecho mal?", se preguntaba ante las cámaras de la cadena ABC. "No teníamos todo lo que queríamos, pero sí, todo lo que necesitábamos (...). Se han llevado a mi último hijo".

Esta trágica historia llevaba años conmoviendo a los medios estadounidenses y ahora, en medio del acentuado debate sobre las armas, esta madre de Chicago Shirley puede convertirse en una de las mejores bazas -por su eco en los medios- durante la campaña de Barack Obama y el Partido Demócrata por un control de armas más estricto en EEUU.

Cada año mueren unas 30.000 personas por las armas en EEUU, según el Centro Legal para la Prevención de la Violencia Armada (Law Center to Prevent Gun Violence), que califica la cifra de "epidémica" al compararla con datos del Centro de Control de Enfermedades y Epidemias de EEUU. "Hay más ciudadanos de Chicago muertos por disparo que militares de EEUU fallecidos en Afganistán, sin duda", apuntaba el centro de investigación Global Research el pasado diciembre.

"No es Chicago, es la gente con pistolas. No deberían llevar pistolas, ¿sabe?", se lamentaba Chambers -54 años- en una entrevista con la CBS el pasado lunes.

Ronnie, su último hijo fallecido, había sido miembro de una banda que robaba coches, vendía drogas y había pasado algún tiempo en prisión, explica la cadena estadounidense. Pero su madre asegura que había cambiado:

"Cambió mucho. Estaba tratando de ayudar a otra gente. Así que cualquier cosa que hubiera hecho en el pasado, está pasada. Cambió", aseguró la madre, conmovida.

Hace tan solo un mes, Ronnie había acudido invitado a un programa de la CBS "como un ejemplo de transformación", rememora la televisión. "Me dije a mi mismo que debía proteger a mi madre y estar aquí fuera por ella", explicó entonces.

Pero Ronnie no tuvo otra oportunidad. El sábado pasado una bala acabó con la vida del único hijo que Shirley Chambers aún tenía con ella.

Tras la matanza en una escuela de Newtown el pasado diciembre, el debate sobre la tenencia de armas en EEUU se ha acrecentado y Obama ha iniciado el proceso para incrementar el control sobre ellas.

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