Joseph Kony: la caza del monstruo continúa

Hay 100 asesores militares estadounidenses trabajando estrechamente con soldados de Uganda y de la República Centroafricana para atrapar a Kony. Pero eso no ha detenido la violencia del LRA, que en lo que va de año suma 50 ataques, nueve muertos y 90 secuestros, según un nuevo informe sobre terreno de Enough Project.

El LRA de Kony se ha reducido de 300 a 200 combatientes, que se han dividido en pequeños grupos, según Michael Poffenberger, director ejecutivo de Resolve, un grupo de presión anti Kony en Washington.

"El relativamente pequeño número de combatientes del LRA ha tenido un impacto desproporcionado a lo largo de África central, en donde sus ataques, matanzas y secuestros han causado el desplazamiento de más de 400.000 personas", asegura Poffenberger. "Se necesita hacer más para reducir la violencia y para permitir que la gente pueda seguir con sus vidas".

Los pequeños grupos del LRA están desperdigados por la espesa jungla de la República Centroafricana, Sudán y la República Democrática del Congo. Se cree que El propio Kony está en Sudán, y se especula que le apoya el presidente de Sudán, Omar al Bashir.

"No es casualidad que Kony y otros combatientes del LRA estén operando en esas zonas. Son algunas de las más remotas del planeta", afirma Poffenberger.

"Las administraciones gubernamentales son débiles o inexistentes, y sus junglas espesas dificultan las operaciones para seguirles la pista. Esas áreas no tienen carreteras asfaltadas, puentes o redes de radio en FM. Uganda sí tiene ese tipo de infraestructura, lo que ayudó a su Ejército a la hora de perseguir y expulsar al LRA de su territorio".

Capturado el segundo monstruo de alto rango

Además de Kony, hay entre 5 y 10 comandantes del LRA que dirigen grupos rebeldes itinerantes, afirma Poffenberger.

Uno de principales comandantes bajo el mando de Kony, Casear Acellam, fue capturado el 12 de mayo en la República Centroafricana. Es el miembro de mayor rango del LRA detenido hasta el momento. Se espera que Acellam, jefe de Inteligencia del grupo rebelde, aporte información estratégica para fortalecer la campaña contra Kony.

Pequeñas unidades del Ejército de Uganda estuvieron siguiendo los movimientos del "teniente general" Acellam durante por lo menos un mes. Estrechando el cerco de día y de noche, Acellam fue finalmente capturado en una operación en el río Mbomou, que marca la frontera entre la RDC y la República Centroafricana, según ha informado el Ugandan Observer.

Para evitar su detención, Acellam supuestamente iba vestido como los típicos pastores centroafricanos. Pese a haber cursado sólo hasta el bachillerato en el norte de Uganda, es considerado uno de los comandantes más meticulosos y peligrosos del LRA.

La detención de Acellam ha sido bien recibida por el comandante del Mando África de Estados Unidos (AFRICOM), el general Carter F. Ham. "Tengo confianza en que Joseph Kony será llevado ante la justicia. No estoy seguro de cuándo será", ha declarado al periódico ugandés New Vision.

"Tenemos que localizar un grupo pequeño en una zona enorme y compleja. La detención de Acellam es un buen paso. Las preguntas que se le harán ayudarán a las fuerzas de seguridad a conocer la situación del LRA", señala.

Las autoridades de Uganda debaten ahora si Acellam puede acogerse a una amnistía si delata a Kony, o si debe ser acusado por la violencia del LRA, según ha informado AP.

La captura exitosa de Acellam subraya la necesidad de más acciones similares para poder capturar a Kony.

"La misión de las tropas de EEUU fracasará en su objetivo de capturar a Kony y poner fin al LRA a no ser que se implementen unas serias mejoras en el esfuerzo general", afirma John Prendergast, co fundador de Enough Project. "Menuda pérdida del dinero de los contribuyentes si EEUU envía fuerzas a la zona y después resulta que no se asegura que hay elementos suficientes para que la misión sea un éxito".

¿Cómo estrechar el cerco alrededor de Kony y devolver la paz al centro de África?

1) Más tropas y mejor coordinación. Actualmente la columna vertebral de la operación anti-Kony es un contingente de 800 soldados del Ejército de Uganda. Se necesitan más tropas para cubrir esa enorme área. Y mejores acuerdos regionales que les permitan perseguir al LRA a través de las fronteras de la República Centroafricana, el Congo y Sudán.

2) Más poder aéreo. Los aviones, y especialmente los helicópteros, son los que mejor pueden explorar el ingente territorio por el que se mueve el LRA. Además, pueden transportar mejor a los soldados a las zonas donde operan los rebeldes.

3) Mejor comunicación y relaciones con las comunidades. No todos los esfuerzos contra Kony tienen que ser militares. Las emisiones de radio comunitarias y los panfletos lanzados desde el aire pueden ayudar a comunicarse con los hombres de Kony y animarles a que se entreguen. Se les puede animar a regresar a vivir a sus comunidades y a vivir una vida en paz.

"El hecho inquietante es que el LRA continúa operando libremente en las zonas fronterizas del Congo, Sudán del Sur y la República Centroafricana", afirma Kasper Agger, investigador de Enough con base en Kampala.

"Tan sólo un planteamiento multilateral, incluyendo el aumento de tropas y de poder aéreo por el lado militar, y una mayor comunicación que anime a los miembros del LRA a rendirse, lograrán poner fin a los más de 20 años de violencia y atrocidades que Kony y su ejército han infringido en el centro de África", sostiene.