Santos, al recibir el premio Nobel de la Paz: "Hay una guerra menos en el mundo"

  • Un emocionado Santos ha recogido el diploma y la medalla que lo acreditan como Nobel de la Paz "en nombre de todos los colombianos" y, en especial, de las víctimas.

    Santos estuvo acompañado de siete víctimas de las FARC, entre las que destacan la ex candidata presidencial Íngrid Betancourt y su ex asesora Clara Rojas.

Santos recibe el premio Nobel de la Paz por firmar la paz con las FARC
Santos recibe el premio Nobel de la Paz por firmar la paz con las FARC
L. I.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha recibido este sábado en Oslo el premio Nobel de la Paz con el que fue galardonado el pasado octubre por firmar la paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Un emocionado Santos ha recogido el diploma y la medalla que lo acreditan como Nobel de la Paz "en nombre de todos los colombianos" y, en especial de las víctimas, en una ceremonia celebrada en el Ayuntamiento de Oslo ante un auditorio de más de mil personas.

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Junto al jefe de Estado han estado las siete víctimas, entre las que destacan la ex candidata presidencial Íngrid Betancourt y su ex asesora Clara Rojas, que han viajado en representación de los ocho millones de afectados por la guerra en Colombia.

El Comité Noruego anunció el 7 de octubre que el Nobel de la Paz de este año era para Santos por sus "esfuerzos" por llevar la paz a Colombia, aunque se trata también de un "tributo al pueblo colombiano", según ha recalcado este sábado su presidenta, Kaci Kullmann. Al acto no fue invitada la otra parte del acuerdo, los guerrilleros de las FARC.

Un premio no exento de polémica, ya que en el momento en el que fue concedido en Colombia habían dicho 'no' a las condiciones pactadas. El premio fue otorgado apenas cinco días después de la derrota en las urnas. Una derrota en la que las zonas urbanas tuvieron gran importancia, ya que esgrimieron el 'no'. Por su parte, las zonas rurales, donde las FARC tienen más presencia, optaron por el 'sí'."El primer paso fue dejar de ver a los guerrilleros como enemigos"

"En un momento en que nuestro barco parecía ir a la deriva, el premio fue el viento de popa que nos impulsó para llegar a nuestro destino: el puerto de la paz", ha alegado Santos en su discurso. "El primer paso, uno crucial, fue dejar de ver a los guerrilleros como enemigos, para considerarlos simplemente como adversarios. Hay que estar dispuestos a tomar decisiones difíciles, audaces, muchas veces impopulares, para lograr el objetivo final de la paz".La paz de Colombia es un mensaje de esperanza al mundo. Hoy recibiremos el #NobelXLasVíctimas de un conflicto armado que ya es historia— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) 10 de diciembre de 2016

Desde el fallido referéndum han pasado dos meses, pero el país sigue avanzando para intentar ratificar el acuerdo. Para ello han introducido leves modificaciones que no han servido para contentar a la oposición, encabezada por Álvaro Uribe. 

"Hay una guerra menos en el mundo, ¡y es la de Colombia!", ha defendido Santos, que ha recordado en su discurso al otro Premio Nobel colombiano, Gabriel García Márquez. "Los colombianos [tras el no] nos sentíamos como habitantes de Macondo: un lugar no solo mágico sino también contradictorio".

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"Tan solo hace dos meses, los colombianos –y de hecho el mundo entero– quedamos impactados cuando, en un plebiscito convocado para refrendar el acuerdo de paz con las FARC, los votos del 'no' superaron por estrecho margen a los votos del 'sí'. Fue un resultado que nadie imaginaba", ha confesado Santos.

El mandatario colombiano ha reiterado que el apoyo de la comunidad internacional ha sido fundamental para el éxito del proceso de paz. A este respecto ha subrayado la importancia del respaldo regional y ha reconocido que ha tenido que acercarse a "gobiernos de países vecinos" con los que tiene "profundas diferencias".

El 24 de noviembre se firmó, de nuevo, el acuerdo entre el gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC. El proceso de paz ya sufre cierto desgaste, tras varias firmas, años de negociación y, en especial, el fallido referéndum de octubre.

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