Niños asesinados, mutilados y convertidos en soldados: así funciona la guerra en Siria

    • La ONG Human Rights Watch denuncia que los milicianos de la oposición emplean a niños soldado.
    • Unicef califica la situación de 'escandalosa' e 'inaceptable'.
El Ejército sirio ataca ciudades, Asad presume de fuerza
El Ejército sirio ataca ciudades, Asad presume de fuerza

Raed tiene 14 años.Transportaba armas, alimentos y otros suministros para los combatientes sirios desde la cercana Turquía hasta que un día le alcanzó una bala y afectó a su sistema nervioso. Ha pasado por cuatro intervenciones quirúrgicas y le quedan tres por delante, según los testimonios recogidos por la ONG Human Rights Watch (HRW) en campamentos de refugiados sirios.

"Siento mi pierna, pero no puedo moverla. No sé si volveré a caminar", comenta el adolescente.

Majid, de 16 años, cuenta que solía portar unakalashnikov para tomar puestos de control y hacerse con sus armas. Este joven de Homs asegura que en su batallón eran 2.000 combatientes contra el Ejército de Bashar al Asad. Ellos le enseñaron a luchar en la guerra.

"Nos enseñaron cómo disparar, cómo desmontar y montar un arma, cómo apuntar", describe. Al final le expulsaron del grupo debido a su edad. Pero espera poder volver a su país y unirse a otra milicia que sí le acepte.

Haizam y Kassim son otros dos chavales con los que ha hablado HRW mientras viven como refugiados en la vecina Jordania. Son de Deráa, otro de los focos de combate en la guerra siria, y aseguran que se apuntaron voluntariamente a una brigada local.

Ellos no participaron en ataques ni recibieron entrenamiento alguno. Su labor consistía en realizar reconocimientos de zonas y guardias nocturnas. "El ELS (Ejército Libre Sirio) simplemente nos dio armas, no hubo entrenamiento (…). Cuando alguien venía, avisábamos a otros. Pero no fuimos a ninguna misión porque éramos demasiado jóvenes", describe Kassim.

Human Rights Watch ha podido hablar directamente con cinco chicos de entre 14 y 16 años que han servido en el frente del lado de la oposición. Algunos se unieron al combate siguiendo el ejemplo de sus hermanos mayores u otros familiares, otros afirman que los milicianos les invitaron a unirse a su grupo.

El Centro de Documentación de Violaciones en Siria, perteneciente a la oposición, ha registrado la muerte de al menos 17 menores que han luchado con el ELS. Asegura que muchos otros han resultado seriamente heridos, y algunos acarrearán una discapacidad física el resto de su vida.

Karim abandonó Homs el pasado verano. Antes de eso, él y sus amigos acostumbraban escalar árboles para avistar el panorama e informar a los milicianos. "Me escondía en los árboles para ver la situación sobre el terreno. Solíamos ayudar al ELS de esta forma", recuerda este ex niño soldado de 15 años.

Unicef ha puesto el grito en el cielo tras informes como éste de Human Rights Watch. Lo resume así: "hay niños que están siendo asesinados, mutilados por bombas racimo y utilizados como combatientes y vigilantes".

"Es más que alarmante, es escandaloso e inaceptable ver cómo se violan los derechos de los niños de esta manera," ha dicho Anthony Lake, director ejecutivo del organismo para la educación y la infancia de Naciones Unidas.

Desde finales de junio de 2012, Médicos Sin Fronteras (MSF) ha tratado a más de 2.500 pacientes y practicado unas 550 cirugías en zonas controladas por la oposición, el único lugar donde han conseguido instalar hospitales, ya que el Gobierno de Asad sigue sin darles permiso para ayudar.

La organización humanitaria indica que "muchos presentaban lesiones a consecuencia de la violencia, como heridas de bala y de metralla, fracturas abiertas y herida debidas a explosiones". Entre los pacientes había mujeres y niños, además de combatientes.

Los niños que llegan al mundo en Siria ahora se enfrentan a problemas desde el vientre materno. "La gente se está quedando sin acceso al sistema sanitario por el conflicto y necesitan atenciones básicas. Muchas mujeres estaban buscando un lugar donde poder dar a luz y también hemos practicado cesáreas", comenta a lainformacion.com Agus Morales, responsable de comunicación para emergencias de MSF.

Un informe de la ONU del pasado agosto ya advertía del uso de niños soldado en las desperdigadas e incontroladas milicias de la oposición. Uno de los líderes del Ejército Libre Sirio aseguró que existían directrices para no emplear a menores en el combate, pero el informe indicaba ya entonces en su lenguaje diplomático que "hay pruebas que sugieren que no se están adhiriendo a esta política de forma uniforme".

Human Rights Watch subraya que sus cooperantes han visto con sus propios ojos cómo hombres sirios en campamentos de refugiados animaban a menores a unirse a la oposición armada. Tres de los cinco chavales con los que habló la ONG no sabían leer y cuatro habían trabajado a tiempo completo antes de participar en los combates.

La mayoría quiere dejar su campamento de refugiados y volver a Siria para luchar. El Estatuto de Roma establece que dejar a menores de 15 años combatir o participar de cualquier modo en un conflicto armado constituye un crimen de guerra. Human Rights Watch indica, sin embargo, que la legislación internacional ha puesto la edad mínima en los 18 años, igual que la Convención de los Derechos de los Niños.

Mientras los enfrentamientos continúan, los precios se duplican y hasta triplican, según los ciudadanos sirios con los que ha hablado Morales durante su reciente visita al norte de Siria, en una zona controlada por la oposición: "La gente tiene miedo, pero sobre todo un sentimiento de incertidumbre por su futuro, con dificultades para satisfacer sus necesidades básicas".

Sigue @maria_torrens

Mostrar comentarios