Desarticulan una red que estafó a 65.000 usuarios con llamadas a líneas "905"

  • La Guardia Civil ha detenido en Barcelona a seis personas que ha estafado unos 114.000 euros a cerca de 65.000 usuarios de telefonía de toda España mediante llamadas fraudulentas que les instaban a llamar a líneas "905" de tarificación adicional.

Barcelona, 17 dic.- La Guardia Civil ha detenido en Barcelona a seis personas que ha estafado unos 114.000 euros a cerca de 65.000 usuarios de telefonía de toda España mediante llamadas fraudulentas que les instaban a llamar a líneas "905" de tarificación adicional.

Según informa la Guardia Civil, los seis integrantes de la red detenidos -tres en Barcelona, uno en Premià de Mar, uno en La Garriga y otro en Castellgalí- han sido imputados por los delitos de estafa, falsedad, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal, mientras otras tres personas han sido imputadas en relación con estos hechos.

La estafa consistía en que las víctimas recibían una llamada telefónica de un terminal de telefonía móvil al que no daba tiempo a contestar por su escasa duración.

Al devolver la llamada, les saltaba una voz grabada que les informaba de una falsa entrega de un paquete postal, para lo que los usuarios tenían que llamar a un número "905", sin que se les advirtiera de que se trataba de una línea de tarificación adicional, ya que en la alocución que recibían comenzaba con el número "90" en lugar de "905".

La operación que ha llevado a desmantelar este grupo se inició tras la denuncia interpuesta por un usuario ante la Guardia Civil de Burgos sobre el posible caso de una estafa telefónica.

Tras las investigaciones llevadas a cabo por los agentes, se constató que este grupo delictivo realizaba sistemáticamente este tipo de estafas a usuarios de telefonía en toda España.

La red llegó a utilizar 21 líneas "905", contratadas con una operadora, con las que habían recibido un total de 64.229 llamadas de teléfonos ubicados en todo el territorio nacional, lo que les había generado unos ingresos superiores a los 114.000 euros.

Los beneficios obtenidos eran inmediatamente retirados de las cuentas de depósito y transferidos a otras cuentas de sociedades creadas y controladas por el grupo, para así dificultar la localización de los miembros de la red y eludir sus obligaciones tributarias.

La Guardia Civil realizó tres registros domiciliarios en la provincia de Barcelona -Premià de Mar, La Garriga y Castellgalí- donde se intervinieron equipos y soportes informáticos, terminales de telefonía móvil, joyas, talones al portador, abundante documentación relacionada con los delitos investigados, así como un programa informático utilizado habitualmente para el envío de llamadas masivas.

La investigación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción Número 3 de Burgos, en coordinación con la Policía Judicial de esta capital.

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