Zalaquett, quien dirige desde 1997 el Centro de Prevención de la Violencia (Ceprev), fue inculpada por la agresión de Samir Matamoros, quien fue detenido el mismo día y presentado este sábado en audiencia inicial en el juzgado tercero local penal de Managua, del juez Ernesto Rodríguez, según el portal oficial El 19.
En la audiencia, a la que no se permitió el acceso de periodistas de medios independientes, Matamoros, de 26 años, habría dicho que Zalaquett le expresó "preocupación de que la gente no estaba llegando a las manifestaciones (...) y que quería meterle leña al fuego para que se armaran cosas distintas".
"Me ofrecieron ahí unas cosas, entonces yo decidí mejor pensarla (...), yo pensé lo que ella me había dicho... no tengo más palabras que decirle, simplemente las cosas se dieron, admito mis errores, tengo necesidades", habría dicho Matamoros al juez Rodríguez, según el portal oficial.
"No tiene sentido lo que dice Samir, él cometió un error. No sé, me duele mucho, le tengo aprecio personal a Samir (...) "a mí no me importa que me investiguen, este es el precio de trabajar por la paz", dijo Zalaquett al diario La Prensa.
La fiscalía imputó a Matamoros cargos por delitos de homicidio en grado de frustración, posesión ilegal de armas y exposición de personas al peligro.
Zalaquett, de origen chileno nacionalizada nicaragüense en la década de 1980, dirige el Ceprev, un organismo creado en 1997 para fomentar una cultura de paz para apoyar a jóvenes que han estado involucrados en situaciones de violencia.
La comunicadora había reconocido el viernes que Matamoros fue uno de los jóvenes con historial de violencia que fue rehabilitado en el Ceprev pero que hacía un año se alejó del centro.
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