Nuevo round entre gobierno argentino y jefe desplazado del ente audiovisual

  • Un fiscal pidió el allanamiento de la agencia Audiovisual del Estado e imputó este jueves por "usurpar autoridad" al desplazado jefe del organismo, con mandato hasta 2017, en una fuerte disputa en la complicada transición política en Argentina.

El presidente Mauricio Macri ordenó el miércoles la intervención por 180 días a la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) y a la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (AFTIC).

Martín Sabbatella, el desplazado director del AFCSA y hombre cercano a la expresidenta Cristina Kirchner (2007-2015), se resiste a dejar el cargo amparándose en la Ley de Medios que le confiere mandato hasta 2017 y dijo que espera la decisión de la justicia a una medida cautelar que presentó.

"El presidente tomó la decisión de intervenir y Sabbatella se tiene que ir", afirmó el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en una rueda de prensa el jueves en Casa Rosada (gobierno) al sostener que "el decreto es absolutamente legítimo".

Peña hizo "un llamado a la reflexión" al funcionario echado "para que evite una situación complicada para él y para los empleados", dijo al acusarlo de "desconocer la autoridad presidencial".

Sabbatella, quien se presentó este jueves en la sede del AFCSA, en un día semiferiado en Argentina por la víspera de Navidad, reiteró que espera "que el Poder Judicial resuelva el conflicto de poderes".

"Si a este gobierno no le gusta la ley, debe ir al parlamento y modificarla o derogarla, no puede hacerlo por decreto. La ley hay que cumplirla", declaró a los medios frente al edificio del ente en el centro de Buenos Aires.

Tras haber sido denunciado penalmente por el interventor designado del AFCSA, Agustín Garzón, Sabbatella fue imputado este jueves por el fiscal federal Carlos Stornelli de "usurpar autoridad y desobediencia", informaron fuentes judiciales.

Stornelli, exjefe de Seguridad del club Boca Juniors que Macri presidió entre 1995 y 2007, impulsó la denuncia penal y pidió al juez de la causa el allanamiento al organismo.

El objetivo del nuevo gobierno de derecha liberal es fusionar la AFSCA y la AFTIC, pero considera en "rebeldía" a varios funcionarios, entre ellos a Sabbatella, pieza clave del kirchnerismo en la pugna con el grupo mediático Clarín por la Ley de Medios.

El ente Audiovisual es el que se ocupa de hacer cumplir la resolución de que los medios monopólicos vendan en partes sus más grandes unidades de negocios. El sector de Macri votó en contra de la ley sancionada por amplia mayoría en 2009.

La Ley fue impugnada en la Justicia por el grupo Clarín, uno de los más grandes conglomerados de medios de Latinoamérica, lo que inició una larga batalla judicial y la división antimonopólica nunca pudo aplicarse al multimedios.

La intervención de los organismos de aplicación de la ley de Medios fue repudiada por parlamentarios y exfuncionarios kirchneristas, del ala de centroizquierda del peronismo, así como por sindicatos y partidos de izquierda y centroizquierda y organismos de derechos humanos.

"Sabbatella fue votado por acuerdo del Senado y para cumplir la función por cuatro años (hasta 2017). No interesa cuál es el gobierno de turno", advirtió la diputada Juliana Di Tulio, quien consideró que "el gobierno ha comenzado avasallando las instituciones".

En un comunicado, la Red nacional de Medios Alternativos (RNMA) consideró que el decreto del gobierno busca "reencauzar un marco legal que favorezca sin tapujos a los medios monopólicos".

En cambio, el jefe de Gabinete justificó la medida al afirmar que la ley de Medios fue usada como "un instrumento de persecución a los medios que no se ceñian a la política oficialista del kirchnerismo".

Peña sostuvo que el gobierno de Macri busca "generar las condiciones para que haya inversiones en telecomunicaciones".

El bloque parlamentario que responde al opositor de centro derecha Sergio Massa consideró "legítima" la intervención.

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