Una esclava sexual del Estado Islámico: "nos obligaban a rezar y luego nos violaban"

    • Nadia Murad, de 21 años, es una de las más de 5.000 mujeres yazidíes que fueron secuestradas por el Estado Islámico y sometidas a tortura y violaciones.

    • Tras tres meses bajo el yugo de los terroristas, esta joven logró escapar a Alemania y ahora recorre el mundo para contar su historia y pedir a la comunidad internacional que luche contra EI.

Nadia Murad durante su discurso ante la ONU en el mes de diciembre
Nadia Murad durante su discurso ante la ONU en el mes de diciembre

Estado Islámico está cometiendo un genocidio contra los yazidíes, una minoría considerada étnicamente parte de los kurdos que sigue una religión propia (combinación de zoroastrismo, cristianismo e islam) y cuenta con unos 600.000 miembros, repartidos en la región que forman las fronteras entre Irak, Siria. Desde que los yihadistas tomaron el control de Irak y Siria, los miembros de esta etnia han sufrido la persecución, el acoso y la tortura de Estado Islámico.

Hemos visto imágenes escalofriantes de la huida de esta comunidad, pero ahora conocemos su sufrimiento a través de las palabras de una esclava sexual que fue capaz de huir y ahora se dirige al mundo para hacer un llamamiento a la comunidad internacional a unirse contra la amenaza de ese grupo terroristas.

"Desde hace un año y medio, Estado Islámico está vendiendo y alquilando niñas de nueve años como esclavas sexuales", cuenta Nadia Murad,yazidí, secuestrada por el Estado Islámico en 2014. Tuvo la suerte de escapar del cautiverio donde estuvo tres meses como esclava sexual, y esta semana durante su visita a Londres ha descrito las atrocidades de EI contra su pueblo.

Desde la sede de la organización británica que representa a los sindicatos del Reino Unido, Trades Union Congress, Murad afirmó que unas 3.400 mujeres y niños de la comunidad yazidí siguen retenidos como rehenes del Estado Islámico, que sigue matando a hombresyazidíes secuestrando a sus mujeres, explica el diario británico 'Mirror'. "La gente puede pensar que mi historia es dura, pero muchos han vivido historias más duras que la mía. Los yihadistas han matado a seis de mis hermanos, pero hay familias que han perdido diez hermanos", describe.

Nadia Murad lleva dos meses describiendo las atrocidades de Estado Islámico contra su pueblo. En el mes de diciembre relató, por primera vez, anteal Consejo de Seguridad de la ONU, el martirio que vivió tras haber sido violada, torturada y vendida por los terroristas. "El Estado Islámico no vino sólo a matar a nuestras mujeres y niñas, sino que nos tomaron como botín, como mercancía que puede ser intercambiada".

Durante este encuentro, esta joven yazidí arrancó las lágrimas del auditorio al explicar que los bárbaros del EI les obligaban primero a rezar y después les violaban repetidamente. "No quise suicidarme, pero deseaba que me matasen", aseguró en un reportaje de Time.

Nadia pudo huir pudo escapar. Tras tres largos meses sufriendo continuas violaciones y abusos, que incluyeron palizas, consiguió huir de la tortura y fue trasladada a Alemania, donde también recibió atención médica y refugio en Stuttgart.

Desde entonces recorre el mundo para contar la historia de su pueblo. "Al menos 5.800 mujeres y niños yazidíes han sido secuestrados por Estado Islámico. Han matado a mucha gente y millones están desplazados. Matan a los hombres y se quedan con las mujeres y los niños. Asesinan, matan y violan en nombre del Islam", insiste. Según sus cálculos, "en estos momentos unas 3.400 mujeres continúan bajo el control de los yihadistas".

"Los yazidíes valemos menos que los animales. Violaban a las mujeres en grupo y hacen con nosotros cosas inimaginables", contó durante un encuentro con el presidente Abdel Fatahl Al Sisi, en El Cairo.

De momento, los esfuerzos por detener el avance de los yihadistas ha permitido volver a recuperar el control del 60 por ciento de la provincia de Sinjar, hogar de esta etnia cuyas raíces se remontan al año 2.000 antes de Cristo. "Se han descubierto al menos 27 fosas comunes", denuncia ante la sede de la organización británica que representa a los sindicatos del Reino Unido, Trades Union Congress.

Antiguamente, los yazidíes eran un pueblo guerrero y ocupaban zonas de Irak, Turquía, Siria, Irán, Georgia y Armenia. Para los yihadistas, que dicen profesar una versión ultraconservadora del Islam, el yazidismo es una "herejía". Hace dos veranos, esta etnia protagonizó un éxodo masivo. Caminaron por el desierto a pie y bajo temperaturas que superaban los 40 grados. Muchos de ellos se encuentran malviviendo en campo de refugiados en el norte de Irak. "Hemos perdido la confianza en el gobierno, no podemos regresar a nuestro hogar, sin protección", asegura este joven valiente de solo 21 años que pese a perder a su familia no pierde la fuerza para seguir contando su historia y denunciar la situación de su pueblo.

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