Euskadi y Navarra gobernadas por el PNV más poderoso de toda su historia

El PNV acumula poder. Tras la toma de posesión de Iñigo Urkullu como lehendakari, bajo el árbol de Gernika y en la histórica Casa de Juntas de la localidad vizcaína, los jeltzales siguen ampliado su poder institucional situándose como la primera fuerza en diputaciones y alcaldías de la Comunidad Autónoma Vasca. Actualmente, el PNV gobierna, bien es cierto que con la inestimable colaboración del Partido Socialista de Euskadi (PSE) en las tres Diputaciones Forales vascas y en 121 municipios de Euskadi,  entre ellos las tres capitales Bilbao, Donostia y Vitoria-Gasteiz....Y Geroa Bai en Navarra

Pero es que la cosa no queda ahí y el PNV, a través de su franquicia navarra, Geroa Bai, también ostenta el bastón de mando en el Gobierno de Navarra, donde la ex diputada Uxue Barkos subió al poder en verano de 2015. Incluso, los peneuvistas, sus cinco diputados en el palacio de la Carrera de San jerónimo, son imprescindibles para que el PP y Mariano Rajoy puedan aprobar los Presupuestos Generales del Estado, lo que confiere, a la formación liderada por Andoni Ortúzar una cuota de poder institucional inusitada, como nunca había tenido en su centenaria historia. Sin ánimo a equivocarnos se puede asegurar que estamos, en estos meses crepusculares del año 2016, ante el PNV más poderoso de la historia.

El 37% de cuota electoral en Euskadi

Así, con el 37% de los votos en Euskadi y el 16% en Navarra, iñigo Urkullu se sienta en el trono de Ajuria Enea; Unai Rementeria es el Diputado general de Vizcaya; Markel Olano el de Guipúzcoa; Ramiro González el de Álava; Eneko Goia, alcalde de San Sebastián; José María Aburto de Bilbao; Gorka Urtaran de Vitoria y, como decimos, Uxue Barkos es la Presidenta de la Comunidad Foral de Navarra. Si apuramos incluso, el poder peneuvista se extiende hasta la Plaza del Ayuntamiento de Pamplona donde los 5 concejales de Geroa bai son vitales para que el alcalde, Joseba Asirón (EH Bildu), pueda gobernar.Un partido que se confunde con las Instituciones

Y es que el PNV en Euskadi siempre ha sido el 'partido-régimen', una formación que se confunde con las Instituciones y que, por ejemplo, ha gobernado en la Comunidad Autónoma Vasca desde el inicio de su autogobierno en esta etapa democrática en 1979, salvo el paréntesis de Patxi López (PSE) entre 2.009 y 2012 tras las veleidades independentistas de Ibarretxe. Un partido institucional, de gestión, al que avalan los resultados económicos de Euskadi, el 'oasis vasco' lo llaman algunos, y su pragmatismo.

El objetivo ahora, tras el pacto de coalición firmado con el PSE, es más empleo (bajar el porcentaje de paro por debajo del 10%), incremento de las políticas sociales, el fin ordenado de ETA (disolución y entrega de armas por acercamiento de presos) y más autogobierno. Y es que, el Presidente del Euskadi Buru Batzar (EBB), dirección del PNV, Andoni Ortúzar, ha dicho este domingo en la celebración del 113 aniversario del fallecimiento de Sabino Arana, fundador del PNV, quizás mirando a Catalunya y a la izquierda abertzale, que su partido "jamás llevará a este pueblo a un callejón sin salida".

Por ello, ha subrayado que la formación jeltzale no va a prometer "asaltar los cielos ni alcanzar cimas que se saben inexpugnables". "Vamos a ganar el futuro día a día desde la realidad y la responsabilidad", ha añadido."Unir y no dividir"

Mientras, su socia de gobierno, la Secretaria general del PSE, Idoia Mendía, ha afirmado que el acuerdo de gobierno de su partido con PNV "vuelve a unir a las dos grandes familias políticas de Euskadi, socialistas y nacionalistas", en "un proyecto de comunidad compartida frente a los que quieren dividir" a los vascos "en espacios estancos".Claves para aprobar los presupuestos

El PNV, con quien el PP negocia desde hace semanas los PPG para 2.017, se ha convertido en pieza clave para que Rajoy y su gobierno puedan sacar adelante sus cuentas para el próximo año.Eskerrik asko, Euskadi! pic.twitter.com/x8ZDw48OES— Iñigo Urkullu (@iurkullu) 26 de noviembre de 2016

Así, Andoni Ortuzar, en una entrevista publicada este domingo en el diario donostiarra El Diario Vasco, analiza la situación y separa el acuerdo con el PSE en Euskadi de su relación con el Gobierno de Rajoy. Empieza a haber "gestos de deshielo", reconoce, pero "estamos en la tercera glaciación". El PNV advierte que "parece" que el PP quiere cambiar su actitud hacia ellos, pero la prueba del algodón será solucionar la litigiosidad competencial y comprobar el grado de receptividad a sus "reclamaciones materiales", como el Cupo o el AVE vasco, en la próxima negociación de Presupuestos. "Si no hay un cambio en lo inmaterial, en lo político, será difícil que el PNV apoye nada".