El PSOE asume la abstención; Iceta precipita el giro, pero luego vuelve al 'no'

  • La mayoría de diputados del PSOE ya dan por seguro que permitirán gobernar al PP. Iceta, precipita el giro al abrirse a la "abstención técnica", pero tras ver a Fernández vuelve al 'no'. 

    Será el Comité Federal de este domingo el que decida cómo se hará la abstención: con 11 ausencias, con 11 diputados que rompan el "no"... Hay cinco vías.

Javier Fernández avisa al PP de que el PSOE "en ningún caso le va a dar estabilidad"
Javier Fernández avisa al PP de que el PSOE "en ningún caso le va a dar estabilidad"
EUROPA PRESS

La abstención está ya asumida por la mayoría de diputados (y senadores) del PSOE. Así se ha expresado varios parlamentarios socialistas al término de la reunión que ha mantenido el presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, este martes en el Senado con el grupo parlamentario socialista. Es un cambio de postura de muchos que hasta hace tan solo unas horas defendían el "no es no".

Varios diputados han manifestado al término de la cita con Fernández que han sido las declaraciones de Miquel Iceta las que han propiciado que muchos sanchistas se hayan abierto a la abstención que defiende la gestora del PSOE. El recién reelegido líder del PSC se ha mostrado por primera vez de acuerdo con que haya una abstención técnica "si no hay más remedio".

Pese a ello, el recientemente elegido Secretario general del PSC, ha dicho en su cuenta de 'twitter' tras entrevistarse con el Presidente de la gestora en Ferraz, que su postura "no ha cambiado".He mantenido una reunión cordial con Javier Fernández. Nuestros puntos de vista que son distintos no han cambiado.Haré declaraciones mañana— Miquel Iceta Llorens (@miqueliceta) 18 de octubre de 2016

Pero el 'efecto Iceta' ya se había producido. Así, Eduardo Madina, por ejemplo, ha explicado esta mañana de martes en el en el Senado que el cambio de postura de Iceta, dejando atrás el "no es no" ha precipitado el giro. En palabras similares se ha expresado Antonio Pradas, quien ha destacado que el PSOE va a cumplir con su palabra de que no se celebren unas terceras elecciones.

Lo cierto es que tras las declaraciones de Iceta ha habido un incesante goteo de declaraciones de sanchistas que se han abierto a la abstención. Un giro radical en cuestión de horas.César Luena, mano derecha de Pedro Sánchez, ha señalado que no romperá la disciplina de voto. El que fuera secretario de Organización hasta hace unos días ha recalcado que todos los socialistas deben "cumplir" lo que el partido decide y que así lo hará él con la opción que se tome, porque no se trata de acatar "la disciplina de voto", sino "la democracia"."Todos debemos cumplir lo que el partido decide, claro. Lo que me pregunto es que si sigue el 'no' vigente, si lo cumplirán los demás", ha dicho a continuación. Luena ha reiterado que mantiene su rechazo a Rajoy porque a su juicio es "lo que quiere la militancia" del Partido Socialista.En términos parecidos se ha expresado Adriana Lastra, también exmiembro de la Ejecutiva de Pedro Sánchez, quien ha recordado que el 'no' fue aprobado por unanimidad por el Comité Federal del PSOE. Si ahora se cambia el criterio, ella se atendrá a lo que se decida. "Yo nunca rompería la disciplina de voto", ha asegurado.Luis Tudanca, líder del PSOE en Castilla y León, ha afirmado que siempre ha sido "respetuoso" con las decisiones de Ferraz, sugiriendo que acatará si de ahí sale una abstención.Sara Hernández, secretaria general del PSM, ha reconoce que será respetuosa si hay una mayoría favorable a la abstención: "El PSOE dirá su opinión dentro de los órganos internos y, a partir de ahí, seguirá trabajando para que de esta situación de crisis podamos salir más fortalecidos y con ilusión de futuro".En total, solo tres intervenciones en la reunión han defendido el no. Una de ellas ha sido la de la diputada Margarita Robles, que ha arremetido contra el discurso "catastrofista" de la gestora, y otra la del parlamentario por Guipúzcoa, Odón Elorza.Acabo d defender el No, entre murmullos,la consulta a las bases y medidas d distensión como la convocatoria de Primarias como tarde en enero— Odón Elorza (@odonelorza2011) October 18, 2016La fórmula la decidirá el Comité FederalLa fórmula definitiva para facilitar el Gobierno del PP la adoptará el Comité Federal del PSOE que se reunirá este domingo. Hay cinco vías para ello:1. Que el Comité Federal imponga la abstención en bloqueEs la opción más remota ya que la Gestora sabe que una decisión así provocaría una herida mucho más honda entre militancia y élites socialistas. Además, resultaría muy difícil explicar un cambio de postura tan radical en cuestión de meses: del "no es no" que se impuso a Sánchez a la abstención.Imponer esta posibilidad provocaría también que el Grupo Parlamentario Socialista se rompiera en dos, con un PSOE fiel que votaría lo que saliera del Comité Federal y un nutrido grupo de diputados, entre los que estaría Susana Sumelzo o los siete catalanes, que romperían la disciplina de voto votando no.Exigir la abstención está prácticamente descartado.2. La abstención en concienciaEs una posibilidad que está cobrando fuerza en el socialismo en las últimas horas. El diputado guipuzcoano Odón Elorza ha hablado de ella. Consistiría en que un grupo de diputados votara abstención y justificara su decisión por razones de conciencia. La posibilidad está recogida en la Constitución y en el reglamento del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso.La Carta Magna recoge en su artículo 67 que "los miembros de las Cortes Generales no estarán ligados por mandato imperativo" y el 79 dice que "el voto de senadores y diputados es personal e indelegable".Por otra parte, la citada normativa del PSOE especifica en suartículo 33 que "el Comité Director podrá sancionar la emisión del voto contrario a la orientación acordada por el Grupo, cuando ésta se haya realizado de forma voluntaria y haya sido manifestada explícitamente, sin perjuicio del mecanismo disciplinario previsto en los Estatutos Federales del PSOE".Y añade: "El Pleno del Grupo Parlamentario podrá excepcionalmente acordar la libertad de voto por razones de conciencia, una vez oídas las razones del parlamentario o parlamentarios solicitantes (...) El Comité Director notificará, mediante resolución motivada, la sanción a los interesados, quienes en el plazo de siete días, deberán hacer efectiva la misma o recurrir ante el Comité Permanente. El acuerdo de éste resolviendo el recurso, se tomará en equidad y se notificará al interesado y a la Comisión Ejecutiva federal, en caso de que fuese confirmatorio, para que proceda a hacer efectiva la sanción". Los diputados socialistas, por tanto, pueden abstenerse y razonar que han votado "en conciencia". Incluso, podrían librarse de una posible sanción.Existen varios casos de diputados que han votado en conciencia contradiciendo incluso la disciplina de su grupo parlamentario. Celia Villalobos, del PP, votó en 2005 a favor de la ley del matrimonio homosexual a la que su partido se opuso. Dos años antes, en 2003, el Congreso votó la polémica decisión de ir a la guerra de Irak. Muchos pidieron que el voto fuera secreto pensando que habría algún díscolo popular. No los hubo en la votación, pero sí hubo una víctima día antes. El diputado Luis Acín renunció a su escaño y se dio de baja del partido por no estar de acuerdo con la decisión del gobierno de Aznar. Otro de los casos más sonados en las filas del PP fue el del histórico dirigente y exalcalde de León Juan Morano Masa, que en el pleno del Senado rechazó votar a favor del recorte a las ayudas a la minería. "He obrado con arreglo a mi conciencia y defendiendo aquello en lo que creo", dijo.En el caso del PSOE también se han dado bastantes casos de diputados díscolos. Entre los nombres más importantes se encuentraCarme Chacón, que en 2013 fue sancionada por la dirección del Grupo Socialista por no respetar la disciplina de voto en el debate de dos iniciativas de CiU e ICV sobre el derecho a decidir. Los diputados del PSC votaron a favor y los del PSOE, en contra. Ella se ausentó de la votación.Antonio Gutiérrez, exsecretario general de CCOO no votó a favor de la reforma laboral de Zapatero en 2010. Simplemente se abstuvo rompiendo de nuevo la disciplina de partido. En 2014 al menos dos diputados, entre ellos el miembro de Izquierda Socialista Manuel de la Rocha (que llegó a ser secretario de Economía de Ferraz), solicitaron a la dirección libertad de voto en una moción para celebrar un referéndum sobre Monarquía o República, pero la dirección pidió que se respetara la disciplina en este "tema de Estado" .En la proclamación de Felipe VI pasó lo mismo. En esa votación sí hubo disidencias: el diputado vasco Odón Elorza decidió abstenerse, mientras que otros dos socialistas (el balear Guillem García Gasullay la gallega Paloma Rodríguez) optaron por no participar en la votación de la ley que dio luz verde a su proclamación.3. Once ausenciasExiste también la posibilidad de que once diputados del PSOE se ausenten del pleno del Congreso en el momento de la segunda votación de investidura de Rajoy. Podrían irse al baño, salirse al pasillo, irse a casa... Cualquiera de estas opciones permitiría al líder del PP ser investido.Esta fórmula permitiría que el resto de la bancada del PSOE votará en contra. Sería necesaria, eso sí, una coordinación de once parlamentarios para que, sumados a los (previsibles) 32 síes de Ciudadanos a Rajoy, lograrían superar la negativa del resto de formaciones de la oposición.4. Once abstenciones ¿de andaluces?Otra opción sería la abstención de un grupo de diputados. Tendrían que ser una serie de elegidos muy fieles a la Gestora, capaces de sacrificarse con una postura que, seguramente, les pasará factura en sus respectivas provincias. Una posibilidad de la que se habla en el PSOE es la de que esa abstención la asuman once diputados de una federación potente. Y la única que dispone de más de ese número de parlamentarios esAndalucía, con 18. La fórmula consistiría en que once diputados andaluces se abstuvieran y el resto de diputados socialistas, 74, votarían en contra.5. Libertad de voto para evitar las terceras eleccionesLa ultima opción, que algunos en el PSOE ven como la menos conflictiva, es que del Comité Federal salga una posición genérica en la que solo se inste a sus 85 diputados a evitar las terceras elecciones. Los parlamentarios tendrían libertad de voto y, previsiblemente, un grupo de ellos optaría por la abstención para no sufrir un varapalo aún mayor en las urnas.La solución, en cualquier caso, no es fácil y pase lo que pase va a ser traumática para el PSOE. Ya hay agrupaciones socialistas donde se están produciendo intensos debates entre militantes y dirigentes. A ello hay que sumar la recogida de firmas promovida por el alcalde de Jun para forzar un Congreso federal inmediato. Se avecina, en definitiva, una tormenta de consecuencias inciertas para el socialismo.

Mostrar comentarios