Cancillería panameña rechaza haber complicado la extradición de Noriega

Panamá, 8 sep.- El canciller panameño, Roberto Henríquez, dijo hoy que Panamá seguirá pendiente del proceso de extradición del exgeneral Manuel Antonio Noriega desde Francia, y rechazó que la Cancillería cometiera errores que han complicado su repatriación, como denunció el abogado del exmilitar.

"Rechazo enérgicamente que se quiera responsabilizar a la Cancillería por el hecho de que haya tres procesos (de extradición) ventilándose en cortes en Francia que hayan dilatado en este momento el retorno de Manuel Antonio Noriega a Panamá", señaló Henríquez en rueda de prensa,

Julio Berrío, abogado de Noriega en Panamá, atribuyó este miércoles a "errores" cometidos por el Gobierno panameño el retraso indefinido de la repatriación del antiguo dictador desde Francia, algo que se esperaba ocurriera antes de finales de este año.

Francia autorizó en agosto pasado la entrega de Noriega a Panamá en virtud de una primera demanda de extradición, pero este miércoles un Tribunal de Apelaciones de París decidió continuar un segundo procedimiento por otra solicitud presentada por Panamá, lo que retrasará durante meses la llegada del exdictador a su país.

Según Berrío, la situación es responsabilidad de la Cancillería panameña, que una vez aprobada la extradición de Noriega por uno de los pedidos formales debió desistir de los otros que ha tramitado.

Henríquez aclaró hoy que fue el Órgano Judicial (OJ) de Panamá el que presentó los tres pedidos de extradición y que el Ministerio de Relaciones Exteriores sólo cumplió su función de intermediario entre las autoridades judiciales panameñas y el Gobierno francés.

También expresó que la sugerencia de Berrío de retirar las otras peticiones de extradición para acelerar la repatriación de Noriega no es viable porque Panamá no puede intervenir ni influir "en lo absoluto" en el sistema judicial francés.

Henríquez consideró que el OJ panameño quedaría "muy mal" si retira las peticiones de extradiciones, porque sería "retrotraerse".

El canciller recordó que la primera solicitud de extradición se tramitó ante Francia el 31 de mayo de 2010 por el asesinato, en 1985, del opositor Hugo Spadafora, y fue resuelta favorablemente en agosto por París después de que Estados Unidos dio su visto bueno.

Estados Unidos debía aprobar la repatriación porque Noriega fue trasladado en abril de 2010 desde allí -donde cumplió 20 años de prisión por narcotráfico- a Francia, donde en ausencia había sido condenado a siete años de cárcel por lavado de dinero.

Añadió que la segunda petición fue tramitada el pasado 12 de enero por la muerte en 1989 de el excompañero de armas de Noriega, Moisés Giroldi, y la tercera el 15 de marzo anterior por el asesinato, en 1970, del opositor y sindicalista Heliodoro Portugal.

Los jueces de la sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París optaron este miércoles por continuar la tramitación de la segunda demanda de extradición de Noriega, en contra de la opinión tanto de la Fiscalía como del propio interesado.

Noriega, de 77 años, tiene condenas pendientes en Panamá, dictadas en ausencia, que suman más de 60 años de prisión por cinco sentencias por delitos que van del asesinato a daños ambientales.

Su defensa en Panamá ha adelantado que cuando sea extraditado pedirá el cumplimiento domiciliario de las penas, dada la avanzada edad y la deteriorada salud del exdictador.

El canciller de Panamá dijo desconocer cuánto se dilatará la repatriación de Noriega porque el exmilitar "está totalmente sometido a la jurisdicción francesa", pero dijo que esto no significa que el proceso esté estancado.