La teniente de alcalde de Derechos Sociales, Laia Ortiz, ha recordado este jueves en rueda de prensa que este es el primer recuento desde que entró en vigor el Plan contra el Sinhogarismo 2016-2020, y ha destacado que el objetivo es hacer un diagnóstico para mejorar la capacidad de respuesta de los servicios sociales.
Junto a portavoces de la red en la sede de Càritas de Barcelona, ha explicado que el recuento, como en anteriores, tendrá en cuenta a las personas que duerman en la calle y también las alojadas en recursos municipales específicos, y contará por primera vez con una guía con recomendaciones sobre el abordaje del fenómeno.
Los ciudadanos que quieran participar como voluntarios, que deben ser mayores de edad, deben inscribirse a través de la web 'recompte.barcelona', habilitada por la red --formada por unas 30 entidades-- con el apoyo del Ayuntamiento.
Los voluntarios se distribuirán en grupos de entre tres y cuatro personas para recorrer toda la ciudad; deberán estar disponibles de las 21.30 del miércoles a las 2.00 del jueves, y antes del recuento participarán en una formación.
El portavoz de la red Ricard Barrull ha resaltado que el recuento se hará de nuevo en toda la ciudad, que se ha dividido en más zonas, hasta las 287, de las que 31 serán especiales por dificultades de acceso y otras complejidades --como Collserola y parte del Besòs--, en las que participarán miembros del el Servicio de Inserción Social (SIS) y voluntarios de las entidades, acompañados por la Guardia Urbana y Parcs i Jardins.
MÁS PERSONAS Y MÁS TIEMPO
La portavoz de la red Maite Mauricio ha destacado que las personas que pernoctan en la calle pasaron de 658 en 2008 a 941 en 2016, con un aumento del 40%, y que las que lo hacen en recursos residenciales específicos se incrementaron en un 60% en este periodo, hasta las 1.907 en 2016.
La teniente de alcalde ha lamentado que está "aumentando el sinhogarismo de larga duración", y ha recordado que el 76% de las personas que pernoctan en la calle acumulan más de un año en esta situación, y que el 26% supera los tres años, sumando diversos episodios en su vida.
MÁS EQUIPAMIENTOS
Ortiz ha recordado que en noviembre de 2016 entró en funcionamiento un equipamiento de alojamientos individuales con servicios colectivos para familias, con 48 plazas, y que recientemente se ha puesto en marcha en Sants-Montjuïc el centro Cal Muns, con 41 plazas para personas sin hogar con problemas de salud mental.
Ha destacado que prevén poner en marcha en septiembre otro centro residencial con 20 plazas para jóvenes sin hogar, y que este año terminarán la construcción de un equipamiento residencial en la calle Tànger y otro en la calle Alí Bei, con la previsión de que ambos entren en funcionamiento en 2018.
Ortiz ha defendido que el esfuerzo inversor del Ayuntamiento no tiene precedentes y que la Generalitat también está haciendo un gran esfuerzo, pero las administraciones han ido "por detrás de la realidad, porque continúan creciendo las personas en esta situación", por lo que ha abogado por trabajar a través del plan, que debe ser dinámico.
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