En la Junta de Gobierno de este jueves se han abordado "las limitaciones y obstáculos para los gobiernos locales que implica la Ley de Estabilidad Presupuestaria" en el sentido de reducir la autonomía local, tal y como impuso el Gobierno de la Nación a los ayuntamientos en legislaciones anteriores.
No se trata de una discusión filosófica o teórica sobre "cuánto de buena o de mala es la austeridad" sino de poner sobre la mesa que el Ayuntamiento de Madrid tiene capacidad financiera y solvencia económica superior a la de la Comunidad, por ejemplo. Aún así se encuentra, como el resto de corporaciones locales, con "enormes limitaciones para prestar los servicios que exige la ciudadanía", ha dicho.
"El Ayuntamiento de Madrid viene reduciendo deuda desde hace años pero tiene limitaciones para ampliar la plantilla y reponer la tasa de funcionarios con los que poder cubrir servicios públicos con la calidad que demandan los madrileños", ha añadido.
En este sentido, ha explicado que el de las limitaciones es un problema transversal a todas las administraciones locales, no una cuestión de colores políticos, como lo demuestra el hecho de que es una de las reivindicaciones de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Con la proposición en el Pleno quieren hacer "una llamada de atención" y apoyar los cambios legislativos que podrían producirse desde el Congreso de los Diputados.
"Hoy no tiene sentido de ser en un escenario presupuestario que no requiere esas limitaciones y cortapisas", ha defendido Maestre, que ha apostado por que el Gobierno central "cambie esa dinámica que ahoga al Ayuntamiento y que limita su capacidad para dar buenos servicios públicos".
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