Toronto vota por seguir el legado del polémico Rob Ford o cerrar ese capítulo

  • Toronto está votando hoy al sucesor del polémico alcalde Rob Ford, conocido internacionalmente por su drogadicción y alcoholismo, en unas elecciones que decidirán si la mayor ciudad canadiense apoya las políticas de su controvertido regidor o elige el cambio.

Toronto (Canadá), 27 oct.- Toronto está votando hoy al sucesor del polémico alcalde Rob Ford, conocido internacionalmente por su drogadicción y alcoholismo, en unas elecciones que decidirán si la mayor ciudad canadiense apoya las políticas de su controvertido regidor o elige el cambio.

Aunque Rob Ford no se ha presentado a la reelección, apartado por un tumor maligno que le fue diagnosticado hace poco más de un mes, su hermano mayor y hasta ahora concejal en el Ayuntamiento, Doug Ford, ha tomado su relevo en la elección a la Alcaldía.

La jornada electoral, a la que están convocados los canadienses mayores de 18 años que residen en la ciudad, de 2,8 millones de habitantes, y en la que se eligen también los concejales de los 44 distritos, se está desarrollando sin incidentes.

Centenares de centros de votación en toda la ciudad abrieron sus puertas a la 10.00 hora local (14.00 GMT) y permanecerán abiertos hasta las 20.00 hora local (00.00 del martes GMT).

Los primeros resultados empezarán a conocerse de forma inmediata, aunque el ganador de las elecciones a la Alcaldía no se conocerá hasta dos o tres horas después del cierre de la votación.

Los electores de Toronto tienen tres opciones principales en esta votación.

Por un lado, está el populismo conservador que ha dominado los últimos cuatro años de la mano de Doug Ford, un acaudalado empresario que en 2010 resultó elegido por primera vez como concejal y que es considerado el "cerebro" detrás de Rob Ford.

Por otro, está el candidato conservador John Tory, un respetado empresario que fue presidente del Partido Conservador de la provincia de Ontario, pero que nunca ha podido ganar una elección como líder.

Y en tercer lugar, se sitúa la socialdemócrata Olivia Chow, hasta hace poco diputada en el Parlamento federal del Nuevo Partido Democrático (NPD) y viuda del que fue uno de los líderes políticos más populares en Canadá de las últimas décadas, Jack Layton.

Según las últimas encuestas dadas a conocer a finales de la semana pasada, Tory se convertirá en el próximo alcalde de Toronto gracias a su capacidad para aglutinar el voto de todos aquellos que, sin importar su ideología, quieren votar a un candidato que asegure que la familia Ford no sigue gobernando la ciudad.

La última encuesta, que tiene un margen de error de 3 puntos, dada a conocer el pasado jueves por la firma Ipsos Reid, coloca a Tory con un 42 % de intención de voto, mientras que Ford tiene un 31 %, y Chow un 25 %.

A pesar de la amplitud de la ventaja de Tory, los tres principales candidatos animaron hoy a los habitantes de la mayor ciudad canadiense y la quinta de Norteamérica, a que acudan a las urnas.

Tanto Tory como Ford o Chow recurrieron a la red social Twitter para alentar a sus partidarios, tras una agotadora y prolongada campaña electoral, en un último intento para atraer votos.

Chow inició la mañana con un mensaje de "buenos días" para informar a los electores de que los colegios electorales abrieron sus puertas a la 10.00 de la mañana.

Ford también deseo una "buena mañana", mientras que Tory recordó que los centros de votación cierran sus puertas a la 20.00 hora local y el procedimiento para votar.

De confirmarse en las urnas el vaticinio de las encuestas, los habitantes de Toronto parecen estar dispuestos a dar carpetazo al "reinado" de cuatro años de la familia Ford, marcados por las polémicas, escándalos y la idea que la ciudad se ha convertido en un hazmerreír internacional.

Rob Ford llegó al mundo de la política en el año 2000 con un reducido historial de hombre de negocios al frente de la empresa de etiquetas que creó su padre, quien también era un destacado miembro del Partido Conservador de Ontario.

En 2000, fue votado como concejal de Toronto y diez años después elegido alcalde de la ciudad contra todo pronóstico y para desmayo de muchos.

Los peores temores empezaron a tomar forma a mediados de su mandato con rumores sobre su vida personal, pero todo explotó en mayo de 2013, cuando varios medios de comunicación revelaron la existencia de un vídeo en el que aparece fumando "crack", una potente variedad de la cocaína.

Desde entonces, su mandato y vida personal han estado salpicados de mentiras, disculpas, declaraciones soeces e insultantes, apariciones en los programas de humor nocturnos de la televisión estadounidense y, hace poco más de un mes, un inesperado diagnóstico de cáncer.

El colofón lo puede vivir en las próximas horas su hermano, Doug Ford, el último cartucho de la dinastía Ford para mantener el apellido al frente de la mayor ciudad de Canadá.

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