México, 13 mar.- El Senado mexicano aprobó hoy una reforma a la Constitución para que los delitos contra la libertad de expresión o el derecho a la información sean investigados y sancionados por las autoridades federales.
La reforma, aprobada con 95 votos, quita a las fiscalías estatales las facultades para investigar los delitos contra la prensa, y otorga al Gobierno federal la obligación de garantizar los derechos de los periodistas.
Según organismos de derechos humanos y defensores de la libertad de prensa, México es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, en el cual se reportan 75 asesinatos de periodistas en la última década y una docena de desaparecidos.
La iniciativa, que envió al Senado la Cámara de Diputados en noviembre pasado, reforma el artículo 73 de la Constitución Política referente a la protección a periodistas.
La reforma faculta a las autoridades a atraer e investigar delitos contra periodistas y otros que afecten el derecho a la información o las libertades de expresión e imprenta.
Para entrar en vigor, la reforma constitucional deberá ser aprobada por la mayoría de los congresos estatales.
En su intervención, el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Carlos Jiménez Macías, dijo que "nunca más (...) se diga que no se puede respetar libertad de expresión y que nunca más pueda haber violencia contra cualquiera que la practique".
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) pidió ayer al Senado mexicano aprobar la reforma constitucional para poner bajo jurisdicción federal los delitos contra la libertad de expresión o el derecho a la información.
La aplicación de esta reforma dependerá de la aprobación de las modificaciones correspondientes a la Ley secundaria que deberá ser aprobada por el mismo Congreso mexicano, el cual se dio un plazo de hasta seis meses para que el Gobierno presente las propuestas necesarias.
Medio centenar de medios de comunicación mexicanos exigieron "garantías para el ejercicio periodístico" para el Semanario Zeta, con sede en Tijuana, frontera con Estados Unidos, que ha recibido amenazas de un grupo criminal.
El pasado 22 de febrero editores del Semanario Zeta fueron víctimas de amenazas telefónicas de sujetos que se identificaron como parte de un grupo criminal.
Los medios condenaron las amenazas y expresaron su solidaridad con los periodistas.
En octubre del año pasado, el relator de la ONU para la libertad de expresión, Frank La Rue, aseguró que México "ocupa el primer lugar en violencia contra periodistas en el continente" americano, y "el quinto" en la medición mundial de Naciones Unidas.
Según el Comité para la Protección de los Periodistas, en 2011 Pakistán fue el país con más crímenes de periodistas con siete muertes, seguido por Irak y Libia, con cinco en cada caso y México, con tres.
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