"El referéndum italiano tenía que ver con cambios en la Constitución de Italia, no fue sobre Europa. Y las elecciones presidenciales en Austria iban sobre elegir a un presidente, pero el centro de gravedad de muchos de los debates de campaña fue la relación del país con la UE", ha interpretado el portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas.
Bruselas ha eludido así pronunciarse sobre si teme que el triunfo del 'no' en la consulta en Italia y el posterior anuncio de dimisión de su primer ministro, Matteo Renzi, pueda convertirse en una amenaza para el proyecto europeo y el futuro de la UE.
A las preguntas sobre las negociaciones de Bruselas con el Gobierno italiano para negociar los términos de un rescate al banco Monte dei Paschi, el Ejecutivo comunitario no ha querido dar detalles del contenido de las conversaciones.
"Sí, estamos en contacto con las autoridades, y no, no vamos a comentar casos específicos", ha zanjado el portavoz Schinas, al ser preguntado por si hay contactos entre el Ejecutivo de Jean-Claude Juncker y el Gobierno italiano.
La Comisión ha mostrado su confianza en que las instituciones italianas "ofrecerán una respuesta política convincente", al tiempo que ha advertido de que "la búsqueda de reformas debe continuar", porque "no se acabó" la noche del referéndum.
En lo que a la situación política en Austria se refiere, en cuyas elecciones presidenciales se ha impuesto el ecologista Alexander Van der Bellen frente al candidato de extremaderecha, Bruselas ha aplaudido el resultado.
"Europa fue central en la campaña que llevó a elegir al presidente y el resultado final habla por sí solo", ha celebrado Schinas.
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