Consulta antitrabajadores migrantes en Suiza exaspera a Bruselas y Roma

Suiza provocó este lunes la exasperación de la Unión Europea (UE) e Italia tras la votación en el cantón ítaloparlante del Tesino a favor de limitar el número de trabajadores extranjeros en su territorio.

Esta cuestión es seguida de cerca en Suiza, que no pertenece a la Unión Europea (UE), en Bruselas y también en Reino Unido, en el contexto del Brexit y la futura relación que Londres buscará negociar con la UE. Bruselas prevé mantenerse firme en este caso del Tesino.

"Las cuatro libertades fundamentales del mercado interior (libre circulación de bienes, personas, servicios y capitales) son inseparables, y en el contexto suizo esto quiere decir que la libre circulación de personas es fundamental", declaró este lunes en un encuentro con la prensa, Margaritis Schinas, portavoz de la Comisión europea.

La cólera de los italianos, que en gran número franquean a diario la frontera para trabajar en el cantón del Tesino, no se dejó esperar.

Mientras el presidente de Lombardía (norte de Italia), Roberto Maroni (de Liga Norte), prometió el domingo de noche estudiar "contramedidas adecuadas", este lunes el ministerio de Relaciones Exteriores en Roma anunció que los jefes de las diplomacias de ambos países hablaron por teléfono respecto a este referéndum.

Durante esta entrevista, el ministro de Exteriores italiano, Paolo Gentiloni, "repitió que cualquier discriminación hacia nuestros fronterizos sería un obstáculo para la armonía entre la UE y Suiza".

En el comunicado se añade que su homólogo helvético, Didier Burkhalter, "confirmó que el referéndum de ayer en el cantón del Tesino no tendría consecuencias inmediatas para los trabajadores fronterizos italianos".

En Berna, las autoridades federales indicaron a la AFP que esta votación de los tesineses implica una modificación de la Constitución cantonal, que necesita el aval del gobierno y del Parlamento suizo, que "tomará la decisión final".

"Este procedimiento puede ser relativamente largo (varios meses o años)", especificó a la AFP un portavoz de la Secretaría de Estado para las migraciones.

El texto titulado "Los nuestros primero", sometido a los electores por la Unión Democrática del Centro (UDC, derecha populista) fue adoptado el domingo con el 58% de los votos de los tesineses.

El mismo exige que, en lo sucesivo, la Constitución del Tesino estipule que "en el mercado laboral sean privilegiados ante cualificaciones profesionales similares, quienes viven en su territorio respecto a lo que vienen del extranjero", con el objetivo de luchar contra el "dumping salarial" y la desocupación.

Sobre los 200.000 puestos de trabajo que hay en el Tesino, 63.000 son ocupados por fronterizos, según la radio y televisión pública suiza RTS.

En cuanto a la desocupación, a fines de agosto se registraba un 3,2% en el Tesino, contra 3,1% en el conjunto de Suiza.

"Esta votación no va a facilitar, de cualquier manera, discusiones que ya son difíciles", estimo el portavoz de la Comision europea.

La UE y Suiza han emprendido desde hace meses negociaciones --calificadas de "intensas" en Bruselas--, para determinar de qué manera Berna podría hacer aplicar una precedente decisión popular de 2014, a escala nacional, a favor de la introducción de cuotas anuales de migrantws.

Este sistema, que entrará en vigor en febrero de 2017, ha sido objeto de intensas negociaciones entre Suiza y la UE, pero sin éxito.

El presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, quien estuvo de visita en Zúrich la semana pasada, a fines de octubre debe reencontrarse con el presidente helvético, Johann Schneider-Ammann, para intentar alcanzar "un acuerdo aceptable para ambas partes".

Para la UDC, la iniciativa tiene por objetivo encontrar una solución para el mercado laboral del Tesino, a la espera de que se apliquen medidas previstas a nivel federal.