SÁENZ DE SANTAMARÍA ACEPTARÍA UNA REFORMA CONSTITUCIONAL SÓLO SI SE HACE CON “CONCORDIA Y CONSENSO”

-Avisa de que cambiar la Carta Marga requiere un alto “nivel de aceptación” . La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó este jueves que hay que abordar con “prudencia” la posibilidad de reformar la Constitución y aunque no se opuso a este extremo, sí quiso advertir a la oposición de que hay que analizar “muy bien” los “consensos” y “disensos” antes de plantear una modificación que pueda “malograr lo que construimos hace 40 años”.
Así se pronunció la también ministra de la Presidencia y para las Administraciones Territoriales en su comparecencia ante la Comisión Constitucional, al ser preguntada por el resto de grupos por esta cuestión que, en su opinión, ha de plantearse desde el “consenso” y la “concordia”. Sólo así se “acertará”, advirtió.
En este sentido, hizo hincapié en que una reforma de la Carta Magna tiene que representar “a todos” y no ser el reflejo partidista. También señaló que los ciudadanos se tienen que ver “implicados” para lograr un importante “nivel de aceptación” en cualquier modificación que se pueda plantear.
“Lo que hagamos, hagámoslo para mejorar más que para abrir aquí debates que no sepamos cómo cerrar”, demandó la vicepresidenta, al tiempo que puso en valor el “esfuerzo” y la “generosidad” de los implicados en el proceso constituyente del año 1978.
Dicho esto, pidió a los grupos que se pongan “en la perspectiva” de que la Constitución tiene que servir a 46 millones y medio de españoles. Seguidamente, indicó que no ha visto “mucho consenso” con respecto a qué se debe reformar y cómo. Más bien, constató que aún existen “importantes divergencias” entre los grupos a este respecto.
“REFORMAR O MORIR”
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, dijo a la vicepresidenta que España necesita modernizarse y también su Constitución. “Hay que abordar con tranquilidad una modernización de la Constitución”, declaró, antes de señalar que no se puede pensar en el futuro sin abordar una reformulación de la Carta Magna.
“Le pido que nos pongamos a trabajar e invitemos a todos los partidos que quieren trabajar de esa mesa de trabajo de la reforma constitucional para traer un documento que pueda ser la actualización de la reforma”, reclamó, al tiempo que afirmó que hay que “reformar o morir” y advirtió que para eso hace falta “valentía”.
Por parte del PSOE, el parlamentario Gregorio Cámara reclamó a la vicepresidenta que manifestara “claramente” si está o no el Gobierno abierto a sentar las bases políticas para “abrir la oportunidad” de reformar la Constitución y con qué alcance.
En su opinión, “no podemos postergar más la reforma constitucional”, ya que abordar cambios en este texto “es lo más leal que podemos hacer”. “Este puede ser el gran proyecto político compartido por todos en esta legislatura”, sintetizó el diputado socialista.
El Grupo Confederal de Unidos Podemos–En Comú Podem–En Marea, representado por Xavier Domènech, criticó la falta de claridad de la que a su juicio hizo gala la vicepresidenta. “No me he enterado si están dispuestos a abordar o si no la reforma de la Constitución”, reprochó,
A este respecto, el diputado de UPN Íñigo Alli defendió que antes de plantear una reforma de este texto hay que determinar por qué se quiere hacer, para qué y cómo es la modificación. “Lo que nunca debería hacerse es una modificación como respuesta al estímulo del foco mediático y, ni mucho menos, a la concesión del ámbito de los nacionalistas”, remarcó.
La portavoz de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Marian Beitialarrangoitia, dijo a Sáenz de Santamaría que “el marco constitucional no nos lo hemos dado todos” y subrayó que la ciudadanía vasca no lo apoyó. En cuanto a ERC, Ester Capella insistió ante la vicepresidenta que la Constitución no impediría que se realizase una consulta de independencia si hubiera “voluntad política”.