En sus declaraciones, Abe ha destacado que nombrará a políticos de un amplio espectro para intentar estabilizar su Ejecutivo y conseguir sacar adelante sus reformas, según ha informado la cadena de televisión local NHK.
La citada cadena ha indicado que Abe está contemplando el cese de la ministra de Defensa, Tomomi Inada, criticada en las últimas semanas por pedir a la población que respaldara a un candidato del PLD en nombre de su ministerio y las Fuerzas Armadas.
A pesar de que se retractó posteriormente, los partidos opositores han pedido a Abe que la cese, argumentando que intentó utilizar al Ejército para beneficiar al partido gubernamental.
Los comicios en Tokio han sido interpretados como un referéndum del primer año de Koike al frente del gobierno de Tokio, una ciudad con 11 millones de habitantes, pero también se leen en clave nacional, ya que tradicionalmente una derrota en Tokio es la antesala de una derrota a nivel nacional.
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